Investigador incansable, cocinero extremadamente creativo y muy prolífico, Jean-Luc Fau se ha forjado a lo largo de los años un excelente prestigio en su región, el Aveyron. En este plato, el mar y los sabores exóticos se funden en un armónico abanico de aromas y sensaciones. Perfecto el equilibrio entre dulce y salado, genial la combinación de vainilla y aceite de jengibre, correcto el punto de cocción de la gamba. Además de ser un excelente chef, Jean-Luc Fau es un excelente pintor.