7,5

Arroces, La Cuina de Boro



Olla junta, o lo que es lo mismo, una olla primigenia, donde se pone a cocer de todo lo que se tiene y alcanza. Su versión para el arroz tachona toda la geografía del interior de la Comunidad Valenciana, del Maestrazgo a la Montaña alicantina, y en sus diversas variedades y matices se la llama de muy variadas maneras: caldera de la huerta con alubias y nabos, olleta alcoyana, olla de “recapte” o de provisión que alcanza las tierras catalanas del Ebro, de músico, de pava con pelotas en la zona sur, con garbanzos o no, con trigo, con bacalao incluso...
Así pues partimos de una olla, puchero o cocido... plato sempiterno de la cultura humana pero que en la geografía valenciana se fusiona con el arroz para dar un plato contundente. La olla junta ha sido considerada por la población de Náquera como su enseña gastronómica y, a tal efecto, ha registrado su nombre y receta. Se distingue con claridad del arroz con “fesols i naps” en que lleva gallina y ternera. De Náquera es, precisamente, Boro –Salvador– Pérez Gayete, con más de treinta años cocinando olletas y paellas a leña en su pueblo hasta que su hija, Mayte, le propuso coger los bártulos y bajar hasta Valencia. Allí pasaron varios años, en un local resplandeciente, de techos altos, lámparas de araña y paredes enteladas... donde Boro la bordaba.
En una olla –de aluminio, nada de barro, (no ganarían para cazuelas quebradas)–, se ponen todas las carnes en frío con agua destilada: careta, rabo, manitas y tocino de cerdo, media gallina (para unas 15 raciones), garreta de ternera y huesos de “corvet” (cerdo) y de ternera. Una hora hirviendo a fuego moderado. Se echa entonces nabo blanco y napicol (una variedad de nabo amarillo con sabor a col) y a la media hora se retiran. Las carnes se cuecen otra hora y media. Aparte se han puesto a hervir unas alubias blancas y, más a parte, las “pencas” o cardos, con harina, para blanquearlos. Cuando todo está casi a punto se trocean las verduras y las carnes deshuesadas, azafrán, un pelín de colorante, las alubias, los cardos y el arroz – senia, de la firma Dacha –... y veinte minutos. Cinco antes de estar listo se añade media morcilla de cebolla oreada por comensal, evitando que se deshaga. Se sirve meloso y en cazuela. Contra lo que puede parecer no es tan graso y no da subidón de colesterol.

 

 

Boro Pérez Gayate
Restaurante: La Cuina de Boro
País: España
Localidad: 46015 Valencia
Dirección: Avda. Pío XII, 19
mapa
(+34) 963274959
Cierra: Domingo y festivos por la noche
Precio: 13,50 €


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7,5

Arroces, La Regenta Mar



  • Arroz meloso de Anémonas y Sepionet de la Punxa
  • Arroz meloso de Anémonas y Sepionet de la Punxa

Raúl Barruguer
Restaurante: La Regenta Mar
País: España
Localidad: 12530 Burriana (Castellón)
Dirección: Escollera de Poniente, s/n
mapa
(+34) 964586731
Cierra:
Precio:


Raúl Barruguer
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8

Morcilla de Burgos Embutidos Rios


EMBUTIDOS RIOS, S.A.

País: España
Localidad: 09 550 Villarcayo (Burgos)
Dirección: Pol. Ind. Las Merindades
(+34)947131750
Precio: 2,75€


Empresa que elabora y comercializa aproximadamente el 40% de la morcilla de Burgos que sale al mercado. Responde a una de las características, el ser de Villarcayo, las otras particularidades las marcan las procedentes de Burgos y sus alrededores y las confeccionadas en Aranda de Duero. Existen, pues, morcillas del norte, centro y sur de la provincia.
La de Villacayo y en concreto las de Rios son morcillas suaves y muy equilibradas, sin que sobresalgan ingredientes determinados. Conectan a las mil maravillas con el gusto mayoritario. La textura es un poco más  densa que las otras; alardea de cuerpo. Se elaboran con arroz extra de la D.O . Valencia, llevando también cebolla, manteca y sangre de cerdo, sal, pimienta y pimentón de La Vera. Se comercializan en tripa natural de cerdo y vacuno, a elegir. 
Su paladar y su imbatible relación calidad/precio determinan su omnipresencia en el mercado.

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7

Cantina La Estación

José Antonio Cristofani y Montse De La Torre
Montserrat de la Torre
País: España
Localidad: 23400 Úbeda (Jaén)
Dirección: Cuesta de la Rodadera, 1
mapa
(+34) 687777230
Cierra: miércoles
Precio: 40/50 €
Precio menú degustación: 30 €


  • Carpaccio de Vieiras con Vinagreta de Yozu, Naranja Sanguina, Frutos Rojos y Ralladura de lima
  • Humus con Pimientos Rojos, Berenjena y Anchoa
  • Pulpo a la Brasa sobre Gachas Serranas, Esponja Natural de Algas, y Esfera Liquida de Aceite de Oliva Virgen Extra
  • Bacalao Confitado en Aceite de Oliva Virgen Extra con Gambas Sobre Andrajos de Úbeda.
  • Perdiz Roja de Tiro Escabechada con Verduritas de la huerta y Flor de Zanahoria
  • Camis del Priorato: espuma de vino tinto, galleta de chocolate, crema de queso y
  • Camis del Priorato: Espuma de Vino Tinto, Galleta de Chocolate, Crema de Queso y Frutos Rojos.

  Cantina de la Estación es un restaurante con una decoración curiosa ya que su comedor recrea un lujoso vagón de tren. El Jefe de la Estación es José Antonio Cristofani, un erudito sumiller capaz de transportarle por los mejores viñedos del mundo: Rhin Burdeos, Borgoña... En los fogones de la locomotora se encuentra su mujer, la gran cocinera Montse de la Torre, forjada en la Escuela de Hostelería La Laguna. Una joven realidad con ambición y grandes perspectivas.
Al vagón-restaurante de este gastronómico Úbeda-Express se accede, a conciencia, por una angosta barra de pinchos donde se tapea cuerpo a cuerpo: fideuà negra, alioli y mejillón; falso ochío relleno de rabo de toro y chocolate con crema de patata; albóndiga de calamar con panceta, mikado de atún, entre otras tentaciones bien resueltas de la gastronomía en miniatura, de la que la casa es una de las mejores representantes andaluzas.
El restaurante presenta una cocina andaluza creativa ecléctica harto laboriosa y hasta sofisticada. Construcciones complicadas y con alardes técnicos. Quizás habría que analizar la relación entre los fines y los medios, los medios y los fines. Aunque espectacular resulta humilde y muy efectivo el humus, o puré de garbanzos con berenjena, pimientos rojos y anchoas, todo expuesto como un canapé de alto copete con una pasta ciertamente frágil. Que la cocinera es ambiciosa queda patente en el carpaccio de vieiras con vinagreta de yuzu, naranja sanguina, frutos rojos y ralladura de lima, en que se entremezclan culturas jugando con la acidez y los matices, así como con el cromatismo, en una receta que sin ser un cebiche lo recuerda de alguna manera, claro que visto desde una optica muy de alta culinaria. Otra propuesta francamente interesante es el muy gourmand bombón de foie gras envuelto en oro y queso de cabra, un exceso de sabor que puede potenciarse hasta la última espiral del infinito si le solicita a José Antonio Cristofani que le sirva el vino más adecuado para la orgia. El pulpo a la brasa sobre gachas serranas, esponja natural de algas y esfera liquida de aceite de oliva virgen extra brilla sobremanera por el magnífico tratamiento del cefalópodo, terso y sabroso, de marticar y saborer, siendo la ornamentación la enésima demostración que aquí se juega a la importancia y que no se regatea esfuerzo. También de la mar es menester citar las célebres gambas blancas de Huelva sobre sal aromatizada; los chipirones rellenos de marisco en su tinta, con arroz salvaje y alioli, sabores tradicionales con el valor añadido de la tersura del producto y la gustosidad del marisco. En este capitulo sobresale el bacalao confitado, en verdad jugoso y diáfano, en aceite de oliva virgen extra sobre andrajos de Úbeda con gambas: una fórmula neta y noble. A su vez resultan muy apetecibles otros platos de carne como la perdiz roja de tiro escabechada con verduritas de la huerta y flor de zanahoria y el tostón caramelizado con un puré de cebolleta tierna y naranja.
A la hora de los postres existen distintas opciones atractivas, muy sabrosa aportación a la cocina vinícola como es el Camis del Priorato, una espuma de vino tinto, galleta de chocolate, crema de queso y frutos rojos.
Cantina de la Estación, una de las cocinas y bodegas más inquietas y selectas de Andalucía.

 



Yam'Tcha, Una Cocina Muy Diferente que Triunfa en Paris.

Yam'Tcha, Una Cocina Muy Diferente que Triunfa en Paris.

Adeline Grattard es ya una grande de la cocina.Después de trabajar con Pascal Barbot, “Astrance” y en Hong Kong, inauguró este diminuto y espartano restaurante en 2009, que cuenta con 20 asientos y que dispone de una cocina de 6 ó 7 metros en la que deambulan, asómbrese, cuatro cocineros. Tantas limitaciones y tan poco tiempo no han sido obstáculo para que, fulgurantemente, se haya convertido en una de las mesas más interesantes y seductoras de París.
Su cocina, de neto corte oriental, también innovadora, por supuesto que alta, sin peligros de vértigos, es hoy por hoy, ecléctica; hasta difícilmente definible. Eso sí, tiene una enorme personalidad; no se parece a ninguna. Seguro que con los años, la protagonista es joven y el proyecto no ha hecho sino comenzar, data de 2009, perfilará un estilo, que ya se vislumbra. Tiene dones para ello. Dones y humildad. Humildad y capacidad de esfuerzo. Esfuerzo y entusiasmo. Entusiasmo y vitalidad. Vitalidad y amor a lo que hace. Se siente feliz, muy feliz, cocinando, cocinar le fascina… y, entre perolas, sueña. Es una Cenicienta. Sueña sin excesos. Nada de ínfulas, realismo exultante de talento. Esencialidad y rentabilización al máximo de los medios para obtener unos resultados insospechados. Ni una concesión a las formas, a las decoraciones, al cromatismo…efectividad, efectividad y efectividad.
Un plato pobre y, a la vez, enormemente gratificante que nos acerca a China, esa China que ama a través de su marido: vainas escaldadas con carne de cerdo desmigada, garbanzos picados, sésamo y ajo. Filosofía, sencillez y concreción, que vuelve a quedar patente en los mejillones al vapor, pletóricos de sabor y naturalidad, con tofu ahumado, pepino y sésamo. Primer fogonazo de arte: chipirones, a los que se les han hecho incrustaciones romboidales en el corte, salteados brevemente, dispuestos sobre una juliana de patata pasada por el wok, al dente e inmaculada, con soja negra, pimienta de Sechuan, emulsión de levítico y flores de cebollino. Clarividente y consumada fusión de occidente y oriente: foie gras a la plancha, excelso por calidad y punto, en medio de un jardín de rebozuelos  y berza salteadas en wok, emulsión de zamburiñas secas y el jugo de estas. Rayando en la genialidad, rayando en la perfección. Otra idea portentosa, el bogavante apenas asado, majestuoso, consumadísimo, inmaculado, con gambas secas, churruscadas, desnaturalizadas, en oposición de caracteres, con yema de huevo, tomate amarillo, miso y jengibre. Pureza y limpieza: San pedro al vapor sobre un estirado y liviano puré de patatas rebosante de algas y oceanidad. No se puede obtener más con menos: pollo agridulce con frutos rojos y verduras. Enésima esencialidad mental y explosión gustativa: panceta a baja temperatura sobre grandes trozos de berenjena, primero cocidos y luego salteados en wok, alegremente especiados, con electrizante sensación de pimienta, amortiguada por la carnosidad del vegetal. Y para acabar, algún queso, ciertamente escogido, ya que los postres nunca le han atraído, asevera con esa naturalidad que distingue a los verdaderos, a los auténticos, a los que son y están llamados a triunfar. Una triunfadora llamada a crecer y crecer y crecer… en dos años un 8,5. 
 

75001 París. Dirección: 4, Sauval. (+33) 0140260807. contact@yamtcha.com .Cierra: Lunes y martes. Precio: 50/100 €. Precio menús degustación: 50 Y 85 €.

  • Foie gras con rebozuelos, berza y emulsión de zamburiñas secas
  • Bogavante con gambas secas, yema, tomate amarillo, miso y jengibre
  • Mejillones al vapor con tofu ahumado, pepino y sésamo
  • chipirones sobre juliana de patata pasada por el wok con soja negra, pimienta de Sechuan, emulsión de levítico y flores de cebollino
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7

Fogón

Alberto Herraiz
Alberto Herraiz
País: Francia
Localidad: 75006 París
Dirección: 45, Quai des Grands Augustins
mapa
(+33)0143543133
Cierra: Lunes, los mediodias salvo sábados y domingos, 15/7 al 7/8 y 23/12 al 7/1.
Precio: 40/70 €
Precio menú degustación: 45 €


  • Arroz en paella a banda retornado o socarrat
  • Arroz en paella a banda retornado o socarrat
  • Arroz Aller-retour: Paris-Paris
  • Arroz Aller-retour: París-París
  • Coctel de sangria
  • Coctel de sangria
  • Melón con habas, albahaca y alcaparras
  • Melón con habas, albahaca y alcaparras
  • Ensaladilla rusa con boquerones en vinagre
  • Ensaladilla rusa con boquerones en vinagre y patata frita
  • Bocata de sardinas a la plancha
  • Bocata de sardinas a la plancha
  • Pulpo plancha con piña a feira
  • Pulpo plancha con piña a feira
  • Lenguado a la manzanilla con rebozuelos y  verduras
  • Lenguado a la manzanilla con rebozuelos y verduras

Alberto Herraiz, nacido y formado en un restaurante tradicional de Cuenca, propietario después de un restaurante de cocina moderna, abandona España en 1997 para instalarse en París, ciudad que le sonríe y en la que triunfa con una fórmula tan sencilla como eficaz: tapas y arroces en paella en un ambiente informal y a precios comedidos. Claro que estos estandartes de la gastronomía hispana sabe hacerlos diferentes; impregnarlos de enjundia. Reinventa la culinaria nacional con ingenio, lo que le ha valido que este siempre lleno, así como que lo visiten asiduamente cocineros franceses y que la Michelín le haya otorgado una estrella.
Todo tiene historia y cierta originalidad, un sazonamiento diferente. Es el caso de de la Sangría Fogón, un cóctel sensacional, que cuenta con una base de vermut y vino a la que aporta una corteza de naranja confitada y una mousse de frutos rojos. Segundo fogonazo: unas olivas gordal rellenas de una mantequilla de pimientos del piquillo. Ahí están en similar sintonía, que es una constante, unos gustosos tomates rellenos de charcutería ibérica. Los cogollos se aderezan con una resultota vinagreta de tempranillo y naranja. La imaginación se deja volar menos o más, según cada caso: melón de Cantaloup con alcaparra, habas y albahaca. La ensaladilla rusa aparece enroscada por abajo en boquerones en vinagre y coronada con unas patatas fritas. Los pimientos del Padrón fritos se les da fuerza con huevas de mujol secas ralladas por encima. Simpatiquísimo y ciertamente gustoso el bocadillo de sardinas, dos finas rebanadas pasadas por la plancha que esconden el pescado en conserva. Esta claro que todo tiene su gracia: pulpo a la plancha con piña a la plancha todo ello agraciado con los aromas y sabores del a feira. Uno siente la marca España con aires desenfadados: lingote de foie y jamón de bellota, una terrina en que se juntan ambos manjares, que se aviva con una confitura de piquillos. Croquetas de ibérico, lenguado a la manzanilla en rama con rebozuelos y verduras, gazpacho de pastor con chopitos, manzana y salsa de soja…infinidad de ocurrencia que cambian cada mes y que se culminan con arroces hechos en paella. Es el caso del a banda retornado, que se parece a los arroces “il salto” italianos, fritos para obtener una textura uniforme y crocante, como si fuera un socarrat. Ocurrencias que en otras ocasiones se inspiran en la ciudad del Sena: “Aller-retour: Paris-París”: una blanqueta de ternera en verdad jugosa y sabrosa tiene como guarnición un risotto enriquecido con mantequilla, crema, champiñones, verduras y fragancias de curry, que según va comiéndose invierte los papeles y acaba el arroz por ser el ingrediente principal y la carne su ilustre complemente. Y para terminar dando Vivas a España, nada como una torta de aceite de oliva con mousse de chocolate, higos, uvas, garrapiñadas…dando Vivas a España, a París, al Sena, desde cuyas mesas se contempla y a la Sangría, que nunca antes estuvo mejor y tan gastronómica.
Vanina, mujer del patrón, ayuda a que todo vaya de maravilla
 



Almansa: Mesón de Pincelín

Establecimiento legendario cuya andadura se remonta a 1952, año en que Pascual Blanco, que en opinión de su esposa doña Josefa, que aún se le ve por la casa, vestía como “un pincel”, de ahí su nombre, lo fundó. De entonces ahora el negocio sigue en manos de la familia, dirigido en el actualidad por los hijos, Pedro y Diego, habiéndose incorporado ya la tercera generación, que trabaja en cocina y sala. Tantos años de trabajo y éxito y, por tanto, tanta solvencia, han propiciado, así como la inquietud de los Blanco, a reinvertir en el local, magnifico, en plena consonancia con las construcciones locales, elegantes y rústicas. Además disponen de una barra que se sitúa entre las grandes del país. Se impone picar producto, productos estelares, como en muy pocos restaurantes se encuentran actualmente en España. Las huevas de mujol, bajas en sal y tiernas, jugosas, con una curación breve, son un auténtico manjar. Superior si cabe el Jamón ibérico de bellota, procedente del Valle de los Pedroches, tan bueno y tan regular, que garantiza el sobresaliente. ¡Qué aroma! ¡Qué exquisitez! El lomo de Joselito, las anchoas del Cantábrico, el queso manchego… siempre extraordinarios. Hasta las cortecitas de cerdo merecen destacarse, que se sirven de aperitivo con unas espléndidas aceitunas negras aromatizadas con orégano. En consonancia, mariscos de Santa Pola o Cambados para celebrar la suerte que tiene usted, aunque sea sudando tinta china, dese a la faena de las gambas rojas, quisquillas, cigalas, percebes o almejas de Carril hasta que el cuerpo o la cartera le digan basta.
Otra opción triunfadora: ensalada de perdiz escabechada con lechugas, tomate, ajos confitados y granos de pimienta negros y rojos, además de un logradísimo realce de escabeche, por atemperado, que influye lo justo y preciso sobre la carne y los vegetales. Y siempre obligado hemos de considerar el gazpacho manchego, que junto al de Los Chispos, en Yecla, son los mejorcitos que hemos comido, bastante distintos, tanto monta, monta tanto el uno como el otro. Este aparece copiosa y noblemente engalanado con conejo, pollo de corral, pichón, níscalos y caracoles. Exquisito en su suculencia. Insistimos, gratísima obligación, sea verano o invierno.
Hasta aquí la comida ideal que tiene otras opciones también interesantes y algo más sofisticada en la gamba roja crujiente al aroma de albahaca y en la terrina de foie gras con uvas confitadas, pasas de Corinto y compota de frutas. O en propuestas más apegadas al territorio y el costumbrismo como el gazpacho de verano, que suele llevar rape, atún, mero, gambas y almejas; como nuestro caldo reconstituyente con relleno, las famosas pelotas con la sopa del cocido; o como los garbanzos con albóndigas de bacalao.
La atención no puede ser más próxima y efectiva y hay vinos para todos los gustos y fortunas.
Pasión por la tierra y la tradición; desde la honestidad y caballerosidad.

Localidad: 02640 Almansa
Dirección: Las Norias, 10
(+34) 967340007
Cierra: Domingos noche y lunes.




8,5

Queso de Cabra Ecológico Santa Gadea


SANTA GADEA

País: España
Localidad: 09558San Cristóbal de Rioseco (Burgos)
Dirección: Ctra. Incinillas Valle de Manzanedo, Km 2
(+34)947130317
Precio:


Alfonso Pérez, ingeniero agrónomo, ha creado un proyecto medioambiental idilico: un macro vergel ecológico destinado hacer queso de cabra, contando con una ganadería de 1.000 cabezas. La tecnología es a su vez de vanguardia. Fabricando en dos formatos, ambos pasteurizados, Santa Gadea nº1 y Santa Gadea nº2.
Santa Gadea nº1 es un queso de coagulación enzimática con forma de medallón de tonalidad marfil con corteza mohosa, en cuyo interior esconde una pasta blanda de textura muy cremosa. Si se tiene unas horas a 25 º antes de servir depara un contraste táctil espectacular: duro por fuera y desvaneciente en el centro. El sabor es delicado, sutil, a leche de oveja, con fragancia que recuerdan al campo, a paja. 
Santa Gadea nº2 es más pequeño, de forma cilíndrica chata. Fermentación lenta y larga, obtiene mayores aromas si cabe e intensidad de sabor, con una pasta cremosa arcillosa, más densa y menos interesante que el anterior.