Un vino que desde sus inicios se sitúa entre los más grandes del país y que manifiesta una regularidad asombrosa. La escasísima producción y el que sólo salga en milésimas excepcionales así lo posibilitan. Exuberante nariz, en la que depara sensaciones florales, que recuerdan curiosamente a nardos, así como a frutas amargas y dulces, con presencia de pastilla de café con leche. Sabe a cosas ciertamente asombrosas, hasta increíbles, moras, ciruelas, regaliz, mentolados, sarmientos, café, caramelo... a tantas y tantas cosas y también a una nobilisima madera que se expresa con comedida y precisa elocuencia. Dulce, amargo, tánico... elegante y armónico. Suntuoso, estructurado y carnoso. 100% Tinta Fina. Hizo la fermentación maloláctica en barricas nuevas de roble Allier, donde posteriormente permaneció 18 meses, para pasar a cristal en mayo de 2013. 1.099 botellas y 10 magnum. Vino de una parcela de 1 ha. situada en la propia bodega.

Fernando Chivite aplica con maestría a los Colección 125 Reserva una filosofía de excelsitud bordelesa: variedades nobles e indudable refinamiento aromático y sápido. Y acorde con ese espíritu año tras año refrenda excelencia, reafirma principios, da protagonismo a la finca...
Este 05 atesora una selecta materia prima y una enología perfecta. Personifica el sentido del buen gusto: fruta madura sustanciosa y de gran envergadura impregnada con sutileza de todo y sin que nada sobresalga. Elegancia, armonía, acabado, efectividad... sólo cabe admirar la entidad y la perfección. 65% tempranillo, 30% merlot y 5% cabernet sauvignon. Envejecimiento: 14 meses en barrica nuevas francesas (60%) y de segundo vino de diferentes procedencias. Embotellado en marzo de 2007. 70.773 botellas de 75cl.

Un vino con mucho empaque: aromas, sabor, concentración, estructura, complejidad...Reproduce bayas negras silvestres, también bosque y, sobre todo, uva. A su vez está presente la madera, con presencia de tostados. Se instala en boca, refrendando el carácter, que compagina con elegancia y armonía. Se suceden sensaciones amargas, ácidas y tánicas, que aportan frescor y matices.
64% cabernet sauvignon, 30% merlot, 3% cabernet franc y 3% petit verdot. Estuvo en barricas de roble francés 12 meses. Paso a cristal en junio de 2004.

Un vino con empaque, vigoroso, sustancioso, que da mucho de sí en nariz y boca. Hay fruta, cerezas y frambuesas, también regaliz y, por supuesto, aportes de la madera, como vainilla y tostados, que se expresa compactamente. Sobresale en él a la par que su entereza la elegancia y la armonía, reproduciendo los caracteres olfativos con sobriedad.
60% cabernet sauvignon, 30% merlot, 7% cabernet franc y 3% malbec y petit verdot. Estuvo en barricas de roble francés 18 meses.