El Piamonte tiene una aportación mundial a la dulcería del chocolate, su maridaje con la avellana. La gianduia ha conquistado el universo gastronómico. De cuanto se ha elaborado con esta conjunción, he aquí la golosina más conseguida. Logradísima...
Especialidad típica siciliana que sirve para aderezar indistintos ingredientes como pasta o las carnes blancas y rojas. La verdad es que para culturas foráneas resulta un tanto particular en cuanto los frutos secos juegan un papel casi absoluto. Intervienen pistachos, almendras, avellanas, nueces, aceite de oliva virgen, pimienta blanca, nuez moscada y sal. El sabor se muestra equilibrado, sin que sobresalga ninguno de ellos, prevaleciendo el gusto de conjunto, que se entremezcla con el del aceite y un leve picor final. La textura es la propia de una pasta de frutos secos triturados trabada con el aceite, un tanto granulada.