Queso Fresco de Almendras con Miel de Flores y Aceite de Oliva Virgen

La cocina de Kiko Moya esta a punto de dar un nuevo salto cualitativo. Para ello sólo necesita ir definiendo una personalidad culinaria, cuestión en la que está, ya que hoy por hoy sus construcciones tienen impronta, se distinguen por ser diferentes, por no inspirarse en conceptos o técnicas en candelero. El día que dicten tendencia se revalorizaran, ya que de nobleza, erudición, originalidad y buen gusto, sápido y estético andan sobradas.
Un ejemplo de por donde transcurre el quehacer del chef lo tenemos en esta creación. Una creación minimalista, ingeniosa y sosegada, que reinventa, formal y sapidamente, sabores históricos, de gran raigambre mediterránea. Se trata de una bola cremosa de queso fresco de vaca exuberantemente perfumada con almendra tierna, ciertamente fundente y singular, que se deposita sobre un chorretón de aceite de oliva virgen extra y se le engrandece y termina de contrastar con láminas de almendras tiernas, unos toques de miel y unas flores de tomillo y lavanda.