Uno de los rioja mejor concebidos y más conseguidos en su segmento de mercado. Actual a la hora de manifestarse, también en estructura, y a la vez capaz de conectar con todos los públicos. Resaltan la elegancia y la armonía, con intensidad y complejidad. Aromas de fruta madura con otros aportados por una esmerada crianza, con notas tostadas y especiadas. En boca se suceden momentos dulces, ácidos y amargos, todos expresados con una enorme sutileza e indudable capacidad de convicción. Deja la boca fresca, muestra viveza e incita a seguir bebiendo.
73% tempranillo, 15% graciano y 12% cabernet sauvignon. Permaneció en barricas de roble francés y americano durante 20 meses. En botella desde junio de 2004.