El Piamonte tiene una aportación mundial a la dulcería del chocolate, su maridaje con la avellana. La gianduia ha conquistado el universo gastronómico. De cuanto se ha elaborado con esta conjunción, he aquí la golosina más conseguida. Logradísima...
Empresa charcutera que trabaja notablemente las especialidades típicas: catalana, llonganissa de Vic, llaminets... y, por supuesto, diversas butifarras, de las tradicionales a otras de diseño, que llevan huevo, patata y cebolla; calabacín y cebolla; espinaca con piñones; setas, etc. Entre otras, sobresalen la de perol y la negra.
La primera resulta de una gelatinosidad extraordinaria, así como jugosa y suculenta. Un producto gourmand y muy gratificante, que incita a la gula. Verdadera sabrosidad con una textura que no admite dudas.
La negra se desenvuelve en la misma tónica, si bien algo más atemperada en intensidad y grasa, aunque también con mucha garra. La carne de puerco llega al 75%, incidiendo la sangre, con una precisa salpimentación. Jugosa. Pasar por la sartén, a fuego vivo, con cierta brevedad, de manera que quede dorada por fuera y jugosa en su interior. Preferible caliente a fría.