El Piamonte tiene una aportación mundial a la dulcería del chocolate, su maridaje con la avellana. La gianduia ha conquistado el universo gastronómico. De cuanto se ha elaborado con esta conjunción, he aquí la golosina más conseguida. Logradísima...
Sanfilippo es la marca de anchoas más reputada desde hace décadas. Hasta el año 2009 se dedicaba exclusivamente a la fabricación en salazón, cosa que ha cambiado, pese a la resistencia histórica de Ignacio Sanfilippo, por el pragmatismo comercial, facilitar el manjar al hostelero y al comensal, cada día menos proclives a la excelsitud trabajosa y costosa que supone limpiar una a una las piezas en salazón. Por tanto Sanfilippo ofrece las dos versiones.
Llaman la atención por la atemperada presencia de la sal, lo que redunda en la notoriedad del ingrediente principal, que ve equilibrada su expresión palatal. Luego marcan la diferencia en otras cualidades. Piezas grandes, sin ser tan gordas como las de salazón, resultan hermosas, mostrándose escrupulosamente desespinadas, de un color marrón suave homogéneo y con una textura carnosa y jugosa... ciertamente nobles y artesanas; de lo mejorcito del mercado.
Se comercializa tanto en Filete como en “Bocattos”, siendo preferibles los primeros, que se ofrecen en varios tamaños.