Exuberante en nariz, en los que sobresalen los aromas de fruta muy madura, un tanto de confituras, con recuerdos de frutos negros en plena sazón, así como de bosque. Toques balsámicos, minerales y especiados. De gran volumen en boca, profundo, amplio, carnoso, con gran complejidad en taninos dulces y maduros. Goza de un final largo y persistente, que nos recuerda todas las sensaciones citadas, demostrando gran personalidad.
85% tempranillo, 10% mazuelo y 5% graciano. Realizó la fermentación maloláctica en barricas de roble francés Allier durante tres meses, posteriormente fue trasegado y permaneció dos meses más, para estar a continuación en roble ruso tres meses más.