Un vino de autor muy especial, que responde a su nombre. Elaborado con uvas monastrell de viñedos pie franco de secano con más de 50 años de los que se obtiene un rendimiento de un kilo por cepa. Después tuvo una esperada crianza en barricas nuevas de roble francés, que alcanzó los 14 meses. Pasó a cristal en marzo de 2008. 12.000 botellas.
En nariz brinda complejos aromas de frutas negras en confitura, también a regaliz, balsámicos, tabaco y pimienta. En boca reproduce la frutosidad, con un deje a ciruela, tambien se aprecia cierta mineralidad, mostrando tonos amargos y una dúctil tonalidad. Tiene cuerpo, rusticidad, complejidad y conjunción.