Las cosas claras: el cordero lechal castellano es el mejor de España y el que sirven en el restaurante Mannix es el mejor de Castilla. El cordero se corta en cuartos y se cuece en el horno de leña sobre una bandeja de terracota con agua y sal durante una hora larga, dándole la vuelta dos veces. Marco Antonio García, exponente de la quinta generación de una familia de carniceros y asadores, lo sirve personalmente a la mesa acompañado de una ensalada de lechuga, tomate y cebolla. ¡Una gozada!