Una de las bodegas que mejor lleva el nuevo milenio. En plena expansión de calidad, este es seguramente el mejor Cillar de Silos de cuantos ha elaborado.
En nariz y en boca se muestra noble, profundo y complejo...se olfatea y saborea la calidad intrínseca y el rigor enológico. Se suceden sensaciones amargas, ácidas y tánicas expresadas con sutileza. Completan la presencia de la fruta negra, moras y ciruelas, en perfecta integración con la madera, prevaleciendo la naturaleza.
100% tempranillo. 13 meses de crianza en barricas de roble francés. Embotellado en marzo de 2006.
Este 2e cru classé ofrece una relación calidad-precio interesantísima. Potente, sustancioso, estructurado y tánico, pero con esa elegancia innata y aprendida, ese refinamiento francés que distingue a los vinos de Burdeos y que les ha encumbrado a la gloria. Terruño y saber hacer.
Por la nariz y...
