Esta marca protegida agrupa a 25 productores que cultivan algo más de 50 has con una cosecha anual, según añada, de entre 150.000/200.000 kilos, que se recolectan a mano según estado de madurez. Empiezan a comercializarse bien avanzado junio aunque el 95% se cosechan en julio y agosto. Entre la 10 variedades que se producen sobresalen: negra del país (lampe), lanpins, summit y fresona o napoleón. Dada la situación del Valle de las Caderechas, adquieren especial relevancia bien avanzada la temporada. Estamos antes un producto artesanal y limitado de gran calidad. Suelen tener un sabor intenso, suculento, dulce y acidulado, muy equilibrado, con una textura carnosa, que impresionan. Claro esta, que cada cereza es un mundo.