Resultado de las Vacaciones: Hasta Tres kilos Más
Eleconomista.com
En las vacaciones la rutina se olvida, las obligaciones se reducen, y el control en los hábitos saludables se flexibiliza, lo que para muchos puede suponer más comidas fuera de casa y más copiosas. En consecuencia, se aumenta la ingesta de alcohol y el abuso de grasas y dulces que pasan factura tras el verano en forma de kilos de más, de media 3 kilos cada verano. El 38% de los españoles necesita más de una semana de vacaciones para desconectar
"Realmente es difícil cuantificar cuánto se engorda, pero la media vienen a ser unos 3 kilos", explica el doctor Alber Lecube, coordinador del Grupos de obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN).
El principal motivo es "el abandono de los hábitos que uno va adquiriendo durante el año", como son comer de forma moderada, no picotear entre horas o la vigilancia de los alimentos ricos en hidratos de carbono y calorías.
"En vacaciones uno se olvida, y tampoco pasa nada porque se ganen unos kilos de peso. No hay que poner el grito en el cielo, pasárselo bien es casi una obligación en verano", añade, no sin antes recordar que, sí se toma esta actitud, se debe ser consciente de que se va a coger peso durante las vacaciones.
Fin del verano, fin de los excesos
La solución, según explica Lecube, es ser conscientes de que "cuando el verano se acaba se deben acabar los excesos" y, por tanto, "igual que se vuelve a la rutina en el trabajo hay que volver a la de la alimentación".
"Hay que volver a ser más cuidadoso con lo que uno come, en el día a día", para ello propone aumentar la cantidad de agua ingerida para favorecer la expulsión de toxinas por los riñones; evitar comida grasa; reducir el consumo de alcohol y azúcares, y limitar el consumo de sal.
A la hora de ponerse a dieta, recomienda tener cuidado con la dietas milagro que proliferan antes y después de la época estival. El peso no se pierde con la misma facilidad que coge, por eso alerta de que "vender milagros en el tema del peso es muy fácil, pero perder peso requiere un esfuerzo".
"No pasa nada porque se haga una dieta desequilibrada durante un par de días para reducir peso rápido, pero debe saber que para mantener ese peso o seguir reduciéndolos en el futuro se debe llevar buenos hábitos de vida, comer menos, limitar la grasa", añade.
Del mismo modo, los expertos aconsejan no saltarse ninguna comida (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena); incorporar en la dieta frutas y verduras por su alto contenido en agua y sus propiedades fotoquímicas aumenta la producción de orina y favorece la función renal, lo que ayuda a limpiar el organismo; y mantener una actividad diaria, si es realizando algún deporte mejor.