8,5

Auberge du Vieux Puits

Gilles Goujon
Gilles Goujon
País: Francia
Localidad: 11360 Fontjoncouse
Dirección: 5, Av. Saint-Victor
mapa
(+33) 0468440737
Cierra: Sundays evening, Mondays, Tuesdays, January and February. In summer, only closed on Mondays midday
Precio: 120/170 €
Precio menú degustación: 130 €


  • Espuma de panceta ahumada con crema de habas y tosta de habas, setas y queso
  • Espuma de panceta ahumada con crema de habas y tosta de habas, setas y queso
  • Huevo de la Señora Carrus con apariencia de podrido sobre puré de champiñones tr
  • Huevo de la Señora Carrus con apariencia de podrido sobre puré de champiñones trufado
  • Foie gras asado con tosta sablée al pan de especias con ruibarbo
  • Foie gras asado con tosta sablée al pan de especias con ruibarbo
  • Ostra Gillardeau con caviar de mujol sobre puré de rúcola y berros y nata carame
  • Ostra Gillardeau con caviar de mújol sobre puré de rúcola y berros y nata caramelizada
  • Salmonete sobre cilindro de patata con sopa de pescados y espuma de rouille al a
  • Salmonete sobre cilindro de patata con sopa de pescados y espuma de rouille al azafrán
  • Cabrito en diferentes partes y cocciones
  • Cabrito en diferentes partes y cocciones

Nobody has given Gilles Goujon anything for free. On the contrary. In a bucolic atmosphere far from the mundane noise, in an austere building –sold by the tiny Town Hall– he has been progressively restoring for a decade, he has been able to captivate plenty of customers and reach the top of the French guides: 5 hats in Gault Millau and 3 stars in Michelin. We can say we are before a self-made man who had to fight and sweat blood to reach fame; a fame very few chefs deserve so clearly.
Gilles is a happy man who enjoys eating –eating a lot– and loves the landscape of the place he chose to live in. He is also a noble and genuine person, as we can see through his work and through the products he uses, always excellent and abundant. Generous, in life and at work, he always builds plodding and complex articulations. He transmits his passion for his job; a passion he started feeling in his youth working with Roger Vergé and which allowed him to win the Best Craftsman of France Award.
Get ready for a carnal and refined feast. This is abundance and succulence cuisine made with savoir-faire and passion. Powerful, elegant, virtuosic, full of traditional flavours that have been updated, redesigned and impregnated with a clear personal value.
First example of what we said before: the smoked belly pork foam with bean cream accompanied with a cheese toast, mushrooms and peeled beans; an expressive and distinguished construction. For more inspiration based on timeless values, try Mrs. Carrus’s egg (a soft-boiled egg in appearance) that, once broken in front of the guest by the waiter, bursts out liquidly, like a rotten egg, with black truffle; spectacular, amazing, laid onto a truffled mushrooms purée covered with melanosporum and accompanied by a lukewarm brioche to be chewed and a coffee cup containing the same mushrooms to be drunk; three delicious and complex spaces, full of nuances, all prepared with a refined technique. The big piece of roasted foie gras, fleshy, greasy and brimming with honourable flavour, is pertinently delightful. It is accompanied by a sweet shortcrust pastry with gingerbread, rhubarb with Swiss meringue, and some strawberries slightly soaked with balsamic vinegar. Let us insist on it: this is a spirited and incredibly deeply elaborate cuisine.
Another stunning testimony of raw materials and execution is the gigantic Gillardeau oyster, very shortly heated, raw and hot, covered with mullet caviar and arranged onto a green and exulting rugula and watercress purée and served under a extremely fragile caramel cover, the whole being coated at the last minute with caramelized cream. Somewhere else on the plate, you will find an oyster tartare with seawater foam and a pork tartlet. In short, majestic and greedy perfection. The immensurable tribute to bouillabaisse is a red mullet filet placed onto a potato cylinder stuffed with an onion brandade “en bullinada”, dropped on a fish soup with mussels, cockles, vegetables and toasted bread, and mixed with a rouille foam with saffron which melts when the broth is poured on it. What a delight! Another –very– great dish is the excellent kid proposal, with different facets of the animal: filet in a crunchy leaf with herbs; grilled kid chop, caramelized shoulder, brochette of kidneys and heart, together with a great morel stuffed with meat and enhanced with some thyme flowers juice; sublime.
The raspberry macaron, the cancelé and the full chocolate tartlet are colossal. All the other desserts have the same line and level, like the strawberries with caramelized black olive, lemon thyme sorbet and honey shell-shaped cookie; or like the cocoa cones stuffed with Guanaja chocolate and perfumed with violets, Szechuan pepper and raspberries.
 



8,5

Auberge du Vieux Puits

Gilles Goujon
Gilles Goujon
País: Francia
Localidad: 11360 Fontjoncouse
Dirección: 5, Av. Saint-Victor
mapa
(+33) 0468440737
Cierra: Domingos noche, lunes, martes, enero y febrero. En verano sólo el lunes al mediodía
Precio: 120/170 €
Precio menú degustación: 130 €


  • Espuma de panceta ahumada con crema de habas y tosta de habas, setas y queso
  • Espuma de panceta ahumada con crema de habas y tosta de habas, setas y queso
  • Huevo de la Señora Carrus, con apariencia de podrido, sobre puré de champiñones
  • Huevo de la Señora Carrus, con apariencia de podrido, sobre puré de champiñones trufado
  • Foie gras asado con tosta sablée al pan de especias con ruibarbo
  • Foie gras asado con tosta sablée al pan de especias con ruibarbo
  • Ostra Gillardeau con caviar de mújol sobre puré de rúcola y berros y nata carame
  • Ostra Gillardeau con caviar de mújol sobre puré de rúcola y berros y nata caramelizada
  • Salmonete sobre cilindro de patata con sopa de pescados y espuma de rouille al a
  • Salmonete sobre cilindro de patata con sopa de pescados y espuma de rouille al azafrán
  • Cabrito en diferentes partes y cocciones
  • Cabrito en diferentes partes y cocciones

A Gilles Goujon nadie le ha regalado nada. Muy al contrario, en un paraje bucólico, alejado del mundanal ruido y en un edificio austero -concesión de un diminuto Ayuntamiento-  que ha ido remodelando paso a paso desde hace una década, ha sabido labrarse una multitudinaria clientela y auparse al cenit de las guías francesas: 5 Gorros en Gault Millau y tres estrellas en Michelín. Por tanto, estamos ante un hombre hecho a sí mismo, que ha tenido que llorar y sudar sangre hasta alcanzar la celebridad, una celebridad que muy pocos merecen tanto.
Gilles Goujon es un hombre feliz, al que le gusta comer, comer mucho y el paisaje en el que habita. Es también una persona noble y auténtica, lo que se manifiesta en su quehacer y los productos que emplea, siempre excelsos y en cantidad. Generoso y generoso en el esfuerzo, sus construcciones resultan siempre laboriosas y complicadas. Trasluce amor a su oficio, forjado en su juventud con Roger Vergé, ganó el título de Mejor Obrero de Francia.
Prepárese para un festín carnal y refinado a la vez. Cocina de la abundancia y la suculencia trazada con saber hacer y pasión. Potente, elegante, virtuosa… deparando sabores tradicionales; sabores tradicionales actualizados, rediseñados e impregnados de indudable personalidad.
Un primer testimonio de lo aseverado lo tenemos en la espuma de panceta ahumada con crema de habas, rematada en el aire con una tosta de queso, setas y habas repeladas; articulación tan expresiva como distinguida. Más inspiración en valores intemporales la encontramos en el huevo de la señora Carrus, de apariencia “mollet”, del que, al romperlo el camarero delante del comensal, brota líquido, de apariencia podrida, infiltrado de trufa negra, espectacular, sorprendente, dispuesto sobre un puré de champiñones trufado cubierto por melanosporum con el acompañamiento de un brioche tibio para masticar y una cubeta de capuchino de idénticas setas para beber; tres espacios deliciosos, complejos y rebosantes de matices con la constante de una técnica depuradísima. Ciertamente manjaroso el foie gras asado, un pedazo hermoso, carnoso, mantecoso, rebosante de sabor, de honorable sabor, al que secundan en escena una golosa torta sablée al pan de especias con ruibarbo en jaula de merengue suizo y unas fresas levemente impregnadas de vinagre balsámico. Insistimos, una cocina temperamental currada hasta la extenuación.
Otro testimonio deslumbrante de materia prima y oficio: gigantesca ostra Gillardeau escalfada en un santiamén, cruda y caliente, coronada con caviar de mújol, dispuesta sobre un verde y exultante puré de rúcula y berros y bajo una fragilísima campana de caramelo; todo ello napado en el último momento con nata caramelizada. En otro lugar de la vajilla, un tartar del mismo marisco con espuma de agua de mar y una tartaleta de embutido de cerdo. En tres palabras, majestuosa impecabilidad gulesca. Inconmensurable homenaje a la bullabesa: lomo de salmonete sobre un cilindro de patata crujiente rellena de una brandada de cebolla “en bullinada”, colocado por encima de una sopa de pescados con mejillones, berberechos, verduras y pan tostado, fusionada con una espuma de “rouille” al azafrán, que se derrite al verter sobre ella el caldo. ¡Qué placer! Otro plato grande, grandísimo, el que tiene por protagonista al cabrito, un cabrito excelso, expuesto en múltiples zonas tratadas de diferentes maneras: lomo en hoja crocante a las hierbas, chuletilla planchada, espalda confitada, brocheta de riñón y corazón y, además, una hermosa colmenilla rellena de una farsa de carne y realzado con jugo de flores de tomillo… la intemerata.
Colosales el macarrón de frambuesa, el “cancelé” y la tartaleta de todo chocolate. Y en idéntico estilo y nivelazo los postres. Bien sean las fresas con olivas negras confitadas, sorbete de tomillo limón y magdalenas de miel; bien sean los conos de cacao rellenos de chocolate guanaja y perfumados con violetas, pimienta de Sichuán y frambuesas.
 



7,5

Los Sentidos

Juan Pablo Gámez
Juan Pablo Gámez
País: España
Localidad: 23700 Linares (Jaén)
Dirección: Doctor, 13
mapa
(+34) 953651072
Cierra: Domingo noche, lunes, última semana de julio y primera de agosto
Precio: 35/55 €
Precio menú degustación: 37 €


  • Ostra Marinada con Jugo de Lechuga, Aguacate Picante, Nabo y Remolacha
  • Ostra Marinada con Jugo de Lechuga, Aguacate Picante, Nabo y Remolacha
  • Guisantes, Habitas y Judías Verdes con Agua de Tomate, Lechuga Aliñada y Aceite Helado.
  • Ensalada de Perdiz, Tomatitos, Judías Aliñadas y Aspic de Especias.
  • Ensalada de Perdiz, Tomatitos, Judías Aliñadas y Aspic de Especias.
  • Yema Crocante Trufada con Cremoso de Aceite de Oliva y Rúcola
  • Yema Crocante Trufada con Cremoso de Aceite de Oliva y Rúcola
  • Pulpo Seco al Sol con Langostinos y Verduritas al Vapor
  • Pulpo Seco al Sol con Langostinos y Verduritas al Vapor
  • Ventresca de atún rojo con jugo de anchoas
  • Ventresca de Atún Rojo con Jugo de Anchoas
  • Alcachofas, Mollejas y Anguila con Jugo de Carne y Pomada de Ajo Asado.
  • Maceta de lácteos y frutos secos
  • Maceta de Lácteos y Frutos Secos

Sencillo y muy atractivo restaurante con pequeños comedores elegantemente decorados situado en pleno centro de Linares, un enclave industrial en pleno cruce de todos los caminos que entran y salen de Andalucía. El establecimiento es propiedad de Juan Pablo Gámez, un joven chef formado en la vecina escuela de hostelería de La Laguna en el Puente del Obispo y, después, junto al ínclito  Nacho Manzano en Asturias, que posteriormente se instaló en su tierra natal para montar un restaurante de cocina contemporánea que pusiese en valor la tradición gastronómica de zona a partir de su renovación. No sólo se ha hecho un sitio en la provincia y en la culinaria andaluza sino que goza de creciente reputación a nivel nacional e internacional, que se ha visto refrendada con la obtención del IX Premio Internacional de Recetas con Aceite de Oliva Virgen Extra “Jaén Paraiso Interior”, dotado con 18.000 €, con su plato “Gazpachuelo Virgen Extra con Mariscos, Hinojo y Brotes Marinos”, imponiéndose a prestigiosos chefs de distintos países. Logro que habla bien a las claras del proceso de crecimiento y creatividad por el que atraviesa y que se ve reflejado en los últimos cambios de cartas, con articulaciones cada vez más clarividentes y maduras, que denotan ingenio y erudición. Propuestas creativas inspiradas en la cultura popular andaluza que rezuman originalidad y memoria histórica. Nada pretende epatar sino convencer reinventando y perfeccionando.
Fidedignos testimonios de lo aseverado tenemos en los platos de verduras. Es el caso de los guisantitos, habitas y judías verdes con agua de tomate, lechuga aliñada y helado de aceite de oliva; una manera de articular una ensalada moderna bastante más pensada, trabajada y consumada de lo que es habitual, en definición alta culinaria vegetal. Por tanto fórmulas bastante más complejas, como vuelve a suceder con otras inspiración costumbrista, de la que toma forma de ensalada de perdiz levemente escabechada con tomatitos y judías blancas aliñadas, además de con un audaz y certero aspic de especias. Incluso el método hasta ahora expuesto y las ideas se proyectan en la ostra, que se marina con jugo de lechuga y viste con aguacate picante, nabo y remolacha, en una composición que deja patente que el chef ama su tierra y no se pone fronteras en la mente. Otro guiño a la tradición, tradición en los elementos y agudeza en la estructuración, con resultados siempre agradabilísimos: pulpo seco, poco seco, al sol, con langostinos, verduras al vapor y guisantitos, al socaire de una aterciopelada mayonesa templada y perfumada con jerez. Un colosal alarde técnico en forma de yema de huevo crujiente rellena de trufa negra que se dispone sobre un cremoso de aceite de oliva con rúcola y setas. En verdad rústico y con pinta distinguida el arroz tostado muy ibérico con embutido casero y pimiento rojo; a lo dicho, innovación y respeto a la cultura y al tipismo una y otra vez. Los chopitos, estelares, como todos los productos que se emplean en esta casa, se potencian con un jugo de carne y se les pone contrapuntos con algas y uvas. Otro manjar excepcional, de su sabor profundísimo, de esos que ya no existen, el lomo de ciervo, rosáceo, jugosísimo, que conoce de una escolta también con carácter: vino tinto, castañas, pimienta y jengibre; pletorico. Y las migas dulces con tocinillo, yogur al aceite de oliva, otra constante, otro compromiso en el quehacer de Juan Pablo Gámez, y fruta la pasión, en otra fórmula que compagina distintas referencias y épocas, pusieron la guinda a una tarta que sufla y sufla más aéreamente. Crece con las raíces de un olivo en Jaén.

¡Ah! No por mas sencillo dejar de probar y, consecuentemente, admirar la paletilla de choto, las chuletillas de cabrito a la brasa con patatas a la plancha y vinagreta ajilimójili y el cordero segureño con cuajada de leche de oveja y salvia, ejemplos de excelsitud en su punto optimo.
 



8,25

Casanova 12


Casanova 12
Pazo Casanova, S.L.

Tipo: Blanco
País: España
Zona: Ribeiro
Localidad: 32990 Santa Cruz de Arrabaldo (Ourense)
Dirección: Camino Souto del Río, 1.
(+34) 988384196
Año de fundación: 2000
Producción (botellas): 70.000
Hectáreas y ubicación: 10
Marcas: Casanova y Casanova Máxima
Precio: 14 €


Un ribeiro elaborado con treixadura (80%), godello, albariño y loureira, que responde a las mil maravillas a lo que se espera de un vino de la citada zona. Aromático, frutoso, refrescante y muy grato. Nariz intensa y continuada, que depara una primera sensación cítrica, atesorando una enorme complejidad, incitando a soñar. En boca se ratifican muchos de esos caracteres, sobre todo la frutosidad, así como mineralidad, terroso, mostrando sabrosura y largura dentro de una cierta ligereza. Invita a beber, a lo que contribuye la viveza y la acidez, muy matizada, muy sutil, muy equilibrada, en un conjunto armónico.



8,25

Mais de Cunqueiro 11


Mais de Cunqueiro 10
Bodegas Cunqueiro, S.L.

Tipo: Blanco
País: España
Zona: Ribeiro
Localidad: 32430 Castrello de Mino (Ourense)
Dirección: Prado, 3
(+34) 988489023
Año de fundación: 1985
Producción (botellas): 600.000
Hectáreas y ubicación: 4
Marcas: Mais de Cunqueiro, Cunqueira, Cunqueiro III Milenium y Anciño blanco y tinto
Precio: 10 €


Claro predominio de la variedad Torrontés, lo que marca su identidad. Un blanco muy aromático, muy floral, muy frutal, extraordinariamente personal en la zona, con una textura chispeante, burbujeante, que resulta variopinto, vivo, ligero y gustoso, con una ligera acidez y algunas notas amargas. Tiene un correr fácil y muy satisfactorio.
Participan en su composición Torrontés, Treixadura, Godello y Loureira. 5.000 botellas.
 

Lomo de bacalao, salmorejo y yema de huevo con pimiento asado

El Restaurante "Choco", de Córdoba, ganador de la VIII edición del "Premio al Mejor Plato de Bacalao Giraldo"

El premio, dotado con 6.000 € para el vencedor, se adjudica cada año -y ya van ocho- a aquella obra que, habiendo figurado en carta durante el tiempo de selección (en este caso desde verano de 2.009 hasta mayo de 2.010), haya destacado especialmente por sus aspectos creativos o innovadores.

El chef Kisko García ha sido en esta ocasión el galardonado, gracias a su "Lomo de bacalao, salmorejo y yema de huevo con pimiento asado".

El Jurado del Premio (compuesto por los críticos y expertos gastronómicos Pepe Barrena, José Carlos Capel, Teresa Gallimó, Cristino Álvarez, Maribel Corbacho, Guillermo Campos, Francis Vega, Mikel Zeberio, José Ramón Martínez Peiró, Alberto Luchini, Juan Antonio Díaz y Adolfo Giraldo, este último en representación de la empresa patrocinadora) se reunió en Aranjuez el pasado 3 de junio, en el restaurante Rodrigo de la Calle, ganador de la edición anterior. Tras el análisis de los platos previamente seleccionados, el Jurado se decantó por esta propuesta,en la que intervienen pocos ingredientes y guarniciones pero que armonizan con el gádido a la perfección. Sabores tradicionales, reconocibles, con la debida técnica de ejecución (como la yema de huevo inyectada de jugo de pimento rojo asado) para que el conjunto sorprenda por untuosidad y equilibrio. Un plato que hace honor a la sensata tendencia de actualizar el clasicismo.

El resto de platos seleccionados y finalistas fueron: Bacalao con gelée de pochas y borrajas (Rte. Arbola Gaña. Bilbao); Bacalao, grasa de jamón y compota de tomate y cebolla morada (Rte. Sambal. Noja. Cantabria); Bacalao confitado en aceite de brasas, tierra y roca de olivas negras, guindilla y lombarda (Rte. La Seu. Dénia. Alicante); Bacalao con emulsión de chocolate blanco y aceite de oliva y tagliatelli de manzanilla (Rte. BAKH. Vitoria); Tacos de bacalao con trompetillas (Rte. Zortziko. Bilbao); Bacalao, su propio caldo concentrado y untuoso de calabaza (Rte. Azurmendi. Larrabetzu. Vizcaya); Callos de bacalao con agua de vegetación de pimientos, pil pil y lentejas al comino (Rte. Casa Marcial. La Salgar. Asturias); Ostras a la plancha y velouté de brandada de bacalao al curry (Rte. Zuberoa. Oyarzun. Guipúzcoa); Soufflé de bacalao al pomelo con manzanilla y haba tonga (Rte. Mina. Bilbao); Bacal´ajo (bacalao confitado con jugo de ajo y rigatoni); (Rte. Casa Gerardo. Prendes. Asturias); Huevos con Bacalao (Rte. Zuria. Bilbao); y Lascas de bacalao empapadas en refrito de hinojo con pisto de clorofila de hortalizas (Rte. Rodrigo de la Calle. Aranjuez).

RECETA PLATO GANADOR

 

LOMO DE BACALAO, SALMOREJO y YEMA DE HUEVO CON PIMIENTO ASADO

Ingredientes
100 grs. de lomos de Bacalao Giraldo
20 grs. de pimiento rojo asado
1 yema de huevo

Para el Salmorejo:
6 tomates raf
½ diente de ajo
Aceite de oliva extra virgen
Pan de Telera (pan de la región)
C/s Sal

Elaboración
Bacalao:
Marcar la piel y asar el bacalao a baja temperatura. Reservar para el emplatado.

Salmorejo:
Triturar el tomate junto con el diente de ajo, añadir el pan troceado poco a poco y terminar de emulsionar con el aceite a hilo; poner a punto de sal.

Yema:
Curar en sal 40 min. y reservar. Con una jeringuilla, inyectar en la yema el jugo obtenido de haber asado los pimientos anteriores.

Presentación: Depositar la yema inyectada de jugo de pimientos sobre el lomo de bacalao. A un lado de la vajilla disponer una cucharada de salmorejo cordobés.
 

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7,5

Bigarrade

Christophe Pelé
Christophe Pelé
País: Francia
Localidad: 75017 París
Dirección: 106, Rue Mollet
mapa
(+33) 0142260102
Cierra: Sábados, domingos, lunes al mediodía, festivos y agosto.
Precio: 100/125 €
Precio menú degustación: 85 €


  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado

Formé auprès des grands noms de la cuisine française, Christophe Pelé a lancé un bistrot luxueux de 24 places qui rencontre un franc succès. Son secret ? Le menu à prix fixe entièrement régi par sa cuisine créative. Cela en dit long en sa faveur : prix mesuré, confiance en soi, fraîcheur absolue des produits, rentabilité optimale … Tous ces éléments lui ont permis de se faire une place de choix : deux étoiles au Michelin et deux toques au Gault Millau, que nous approuvons totalement. Pour ce qui est du résultat final, le plaisir éprouvé, la note peut tourner autour du 7,5/10. Concernant la personnalité, la technique et le raffinement, il est clair qu’il existe de grandes possibilités de projection. Les vertus du chef sont incontestables ; le bât blesse juste au niveau de la matérialisation. Les constructions artistiques, par exemple, nettement originales, remarquables, n’atteignent pas le brio souhaité. Souvent, on ne trouve pas le fil conducteur des mets ; les éléments mis en scène, très méritoires sur le plan individuel, ne le sont guère au niveau des combinaisons, des enchaînements ou des leitmotiv. Le jour où cela sera résolu, parallèlement à la maturation intellectuelle du chef, l’œuvre effectuera très probablement un saut qualitatif considérable. Patience …
Les apéritifs sont tous servis simultanément dans trois assettes : un carpaccio bien épais de vache et de thon avec du mouron des oiseaux ; des coques avec du chou rosulaire et du jus d’oignon ; des petits pois avec de l’anguille fumée et du jus de poivrons rouges. Des mets qui méritent la distinction, certes, mais sans plus, sans briller par leur audace intellectuelle ou leur exquisité. La sardine, décorée de fleurs de ciboulette et accompagnée d’une excellente carotte confite, pertinemment savoureuse et fondante, qui comble le palais de douceur, en contraste avec le poisson, sec et salin, est proposée pratiquement crue, immaculée et extrêmement juteuse. La seiche assortie de lard de Collonata et de pois gourmands, minimaliste, fait preuve d’un manque d’étoffe. Le style essentiel se manifeste de nouveau à travers l’asperge blanche, bien grosse, al dente, amère, décorée avec du masago (œufs d’éperlan), du homard, une crème royale du crustacé et une émulsion de fenouil ; des compléments séduisants qui ne font pas d’ombre à l’ingrédient principal et lui apportent des touches enrichissantes. La lotte, succulente, est renforcée par la présence d’une couverture de câpres, pignons, anchois et citron confit. Plus qu’une alliance irréfutable, le pigeonneau, d’un point de cuisson éminent, d’un goût net, tendre et juteux, servi en compagnie de caviar d’Aquitaine et d’épinards, s’avère honorable, extrêmement somptueux.
La kyrielle de desserts, fidèles à la tradition française, affiche un niveau général élevé et réserve quelques moments célestes comme le jus glacé d’ananas avec ananas à la plancha et fleurs de thym ; la crème de citron aux févettes ; la salade de fruits avec biscuit aux épices ; le jus de rhubarbe proposé avec des framboises et de la meringue ; le caramel au beurre salé assorti d’asperges, sucre moscovado et fromage blanc ; la ganache au chocolat avec concombre et olives noires caramélisées, gâteau au chocolat … Le paradis des gourmands…
Une cuisine capable de progresser et d’atteindre les hautes sphères.
 



7,5

Bigarrade

Christophe Pelé
Christophe Pelé
País: Francia
Localidad: 75017 París
Dirección: 106, Rue Mollet
mapa
(+33) 0142260102
Cierra: Sábados, domingos, lunes al mediodía, festivos y agosto.
Precio: 100/125 €
Precio menú degustación: 85 €


  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado

Christophe Pelé es un chef forjado junto a grandes cocineros franceses que ha puesto en marcha con extraordinario éxito un bistrot lujoso con 24 asientos en el que ofrece un menú a precio fijo con su cocina de autor como protagonista total. Eso dice mucho en su honor, precio comedido, confianza en sí mismo, frescura total en los géneros, ajustar rentabilidades…ha logrado hacerse un sitio. La Michelin le califica con dos estrellas, la Gault Millau con dos gorros. A nosotros nos parece que ambas visiones son certeras. Si se analiza el resultado final, el placer que se recibe, la puntuación puede rondar más o menos un 7,5. Si se analiza la personalidad, técnica y refinamiento es evidente que existe una gran proyección de futuro. Las virtudes son incuestionables, ahora bien, falta materialización. En la búsqueda de construcciones artísticas, netamente diferenciadas, siendo notables, no siempre alcanzan la brillantez deseada. En muchos casos no se encuentra el hilo conductor, los elementos en escena son muy meritorios por separado, no tanto la combinación, el enlazamiento o el leiv motiv. El día que eso se consiga, en consonancia con la maduración intelectual del chef, la obra puede dar un salto cualitativo considerable. Es más que probable. Tiempo al tiempo.
Los aperitivos se sirven todos a la vez en tres vajillas diferentes: grueso y neto carpaccio de vaca y atún con pamplina, almeja con col Tatsoi y jugo de cebolla, guisantes con anguila ahumada y jugo de pimientos rojos. Notables, sí, por supuesto que sí, pero sin sobresalir por su audacia intelectual o consumación. Casi cruda, inmaculada y jugosísima, la sardina que se adorna con flores de cebollino y se acompaña de una sobresaliente zanahoria confitada, ciertamente sabrosa y fundente, que llena de dulzor la boca, como contrapunto del pescado, seco y salino. Minimalista aunque sin enjundia la sepia con tocino de Collonata y tirabeques. El estilo esencial vuelve a quedar patente en el espárrago blanco, grueso, al dente, amargo, que se adorna con masago (huevas de eperlano), bogavante, royal del éste y emulsión de hinojo, atractivos complementos que no roban nada de protagonismo al ingrediente principal, al que aportan toques enriquecedores. Suculento el rape, que aparece potenciado por la presencia encima de alcaparras, piñones, anchoa, más limón confitado sobre la porcelana. Honorable y suntuosísimo, más que ser un maridaje incuestionable, el pichón, sabiamente hecho, neto, tierno y jugoso que se asocia con caviar de Aquitania y espinacas.
A la vieja usanza francesa los postres, con un despliegue inenarrable, con un alto nivel general y momentos estelares: jugo helado de piña con piña a la plancha y flores de tomillo; crema de limón con habitas; ensalada de frutas con biscuit a las especias; jugo de ruibarbo con frambuesas y merengue; caramelo a la mantequilla salada con espárragos, azúcar moscabado y queso blanco; ganache al chocolate con pepino y olivas negras caramelizadas, pastel de chocolate… el paraíso de los golosos.
Puede progresar hasta llegar muy alto.
 



7,5

Bigarrade

Christophe Pelé
Christophe Pelé
País: Francia
Localidad: 75017 París
Dirección: 106, Rue Mollet
mapa
(+33) 0142260102
Cierra: Sábados, domingos, lunes al mediodía, festivos y agosto.
Precio: 100/125 €
Precio menú degustación: 85 €


  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado

After learning from important French chefs, Christophe Pelé successfully launched a 24-seat upscale bistro where he proposes a menu at a fixed priced exclusively inspired by creative cuisine. This speaks volumes to his virtues: reasonable price, self-confidence, total freshness of the products, well-balanced profits… These abilities deserved him some recognition: two Michelin stars and two Gault Millau hats; two distinctions we actually agree with. If we analyse the final result, that is to say the experienced pleasure, the mark can reached around 7,5/10. As long as personality, technique and refinement concerns, it is clear that the visions of future are huge. The chef’s qualities are unquestionable, that’s a fact, but there is a lack of materialization. The artistic constructions, clearly original and remarkable, do not always reach the desired distinction. In many cases, we do not find the common thread; although the involved elements are very worthy separately, their combination, succession and leitmotiv leave much to be desired. When all this is solved, along with the intellectual maturity of the cook, his work can make a considerable qualitative leap. It is really likely to do so. It is just a question of time.
The appetizers are all served at the same time in three different plates: a thick cow and tuna carpaccio with chickweed; clams with Tatsoi cabbage and onion juice; peas with smoked eel and red pepper juice. Although these proposals were –obviously– good, their intellectual audacity and exquisiteness were not really distinctive. Almost raw, pure and utterly juicy, the sardine is garnished with spring onion flowers and accompanied with an excellent caramelized carrot, really tasty and tender, with fills the palate with sweetness to counterbalance the dry and salty touch of the fish. The cuttlefish with Collonata belly pork and snap peas is minimalist, but not very substantial. The essential style is also expressed through the white asparagus, really thick, al dente, bitter, garnished with smelt roe, lobster, royale of the crustacean and fennel emulsion, which do not shade the main ingredient and give it some enriching touches. The monkfish, reinforced with capers, pine nuts, anchovy and caramelized lemon, is really delightful. Rather than being an unquestionable pairing, the pigeon, accompanied with Aquitaine caviar and spinaches, is characterized by its doneness, neatness, tenderness and juiciness.
The infinite series of desserts, faithful to the French tradition, offer a high general level and some stellar moments, like the frozen pineapple juice with grilled pineapple and thyme flowers; the lemon cream with baby beans; the fruit salad with spiced biscuit; the rhubarb juice with raspberries and meringue; the caramel with salted butter served with asparagus, muscovado sugar and white cheese; the chocolate ganache with cucumber and caramelized black olives, chocolate cake, … A paradise for the lovers of sweet delicatessen.
This cuisine is able to progress and reach very high levels.
 



7,5

Bigarrade

Christophe Pelé
País: Francia
Localidad: 75017 París
Dirección: 106, Rue Mollet
mapa
(+33) 0142260102
Cierra: Sábados, domingos, lunes al mediodía, festivos y agosto.
Precio: 100/125 €
Precio menú degustación: 85 €


  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Carpaccio de vaca y atún, almeja con col Tatsoi, guisantes con anguila ahumada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sardina con flores de cebollino y zanahoria confitada
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Sepia con tocino de Collonata y tirabeques
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Espárrago blanco con masago, bogavante, royal y emulsión de hinojo
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado
  • Rape con alcaparras, piñones, anchoa y limón confitado

Christophe Pelé es un chef forjado junto a grandes cocineros franceses, que ha puesto en marcha con extraordinario éxito un bistrot lujoso, con 24 asientos, en el que ofrece un menú a precio fijo con su cocina de autor como protagonista total. Eso dice mucho en su honor, precio comedido, confianza en sí mismo, frescura total en los géneros, ajustar rentabilidades… ha logrado hacerse un sitio. La Michelin le clasifica con dos estrellas, la Gault Millau con dos gorros. A nosotros nos parece que ambas visiones son certeras. Si se analiza el resultado final, el placer que se recibe, la puntuación puede rondar más o menos un 7,5. Si se analiza la personalidad, técnica y refinamiento, es evidente que existe una gran proyección de futuro. Las virtudes son incuestionables, ahora bien, falta materialización. En la búsqueda de construcciones artísticas, netamente diferenciadas, siendo notables, no siempre alcanzan la brillantez deseada. En muchos casos no se encuentra el hilo conductor, los elementos en escena son muy meritorios por separado, no tanto la combinación, el enlazamiento o el leit motiv. El día que eso se consiga, en consonancia con la maduración intelectual del chef, la obra puede dar un salto cualitativo considerable. Es más que probable. Tiempo al tiempo.
Los aperitivos se sirven todos a la vez en tres vajillas diferentes: grueso y neto carpaccio de vaca y atún con pamplina, almeja con col Tatsoi y jugo de cebolla, guisantes con anguila ahumada y jugo de pimientos rojos. Notables, sí, por supuesto que sí, pero sin sobresalir por su audacia intelectual o consumación. Casi cruda, inmaculada y jugosísima, la sardina que se adorna con flores de cebollino y se acompaña de una sobresaliente zanahoria confitada, ciertamente sabrosa y fundente, que llena de dulzor la boca, como contrapunto del pescado, seco y salino. Minimalista, aunque sin enjundia, la sepia con tocino de Collonata y tirabeques. El estilo esencial vuelve a quedar patente en el espárrago blanco, grueso, al dente, amargo, que se adorna con masago (huevas de eperlano), bogavante, royal de éste y emulsión de hinojo, atractivos complementos que no roban nada de protagonismo al ingrediente principal, al que aportan toques enriquecedores. Suculento el rape, que aparece potenciado por la presencia encima de alcaparras, piñones, anchoa, más limón confitado sobre la porcelana. Honorable y suntuosísimo, más que ser un maridaje incuestionable, el pichón, sabiamente hecho, neto, tierno y jugoso, que se asocia con caviar de Aquitania y espinacas.
A la vieja usanza francesa los postres, con un despliegue inenarrable, con un alto nivel general y momentos estelares: jugo helado de piña con piña a la plancha y flores de tomillo; crema de limón con habitas; ensalada de frutas con biscuit a las especias; jugo de ruibarbo con frambuesas y merengue; caramelo a la mantequilla salada con espárragos, azúcar moscabado y queso blanco; ganache al chocolate con pepino y olivas negras caramelizadas, pastel de chocolate… el paraíso de los golosos.
Puede progresar hasta llegar muy alto.