Esta empresa, dedicada fundamentalmente a las conservas, esta destacando muy mucho tanto en la preparación de platos típicos asturianos (su fabada es tan buena como la mejor, si es que no lo es; sus choricitos mini a la sidra están muy conseguidos, etc.) como en el lanzamiento de fórmulas inéditas. Verdaderamente originales han de considerarse las combinaciones con algas: bien sea el pulpo o esta torre, en que el bacalao aparece recubierto por dos variedades – musgo de Irlanda y espagueti de mar – y la gelatina marina que se deriva de la cocción en la lata de las citadas algas y el pescado. Preserva inmaculados todos los sabores, especialmente el del salazón, que pese a presentarse en conserva, resulta de una naturalidad y jugosidad asombrosas; gusto reforzado por la oceánidad de los vegetales.