BBVA 'Se Come' La Gula del Norte al Renovar la Abultada Deuda de Portobello

Agustín Marco. El Confidencial

Angulas Aguinaga, la empresa conocida por su producto estrella La Gula del Norte, llegará a Navidad, la época del año en la que, como las compañías de distribución, se juega una parte sustancial de sus ventas.Portobello, su propietario, ha conseguido el visto bueno de BBVA para reestructurar la deuda acumulada por el private equity cuando adquirió la compañía en 2006 por unos 120 millones de euros, la mayoría de ellos pagados con créditos bancarios.
Fuentes bancarias han confirmado la ayuda ofrecida por BBVA a Angulas Aguinaga, empresa guipuzcoana controlada por varias familias vascas que en su día hicieron un gran negocio con la venta del grupo a Ibersuizas. Posteriormente, tras la pelea entre el equipo directivo de la sociedad de capital riesgo y sus accionistas, el fabricante de productos del mar pasó a formar parte de la cartera de Portobello en 2010, cuando los gestores de Ibersuizas constituyeron esta nueva firma de inversión.
Sin embargo, los resultados de Angulas Aguinaga no han sido los que esperaban ni Ibersuizas ni Portobello. Sus ventas, que desde 2000 a 2010 pasaron de 31 a 108 millones, empezaron a deteriorarse por la crisis del consumo. El productor de La Gula del Norte no publica sus cuentas anuales, como tampoco lo hace su matriz, Lagumar Seas SL.
Pero sí lo hace una de sus filiales más importantes,Angulas Aguinaga Burgos, un cocedero de mariscos del grupo que reconoce en sus cuentas anuales sus problemas de viabilidad. La subsidiaria justifica sus pérdidas por “la dificultad para repercutir los costes a los precios de venta en los productos de escaso valor añadido y el incremento de las amortizaciones dadas las activaciones de I+D”.
En 2012, la compañía perdió unos dos millones de euros que, sumados a los números rojos de ejercicios anteriores, han llevado a Pricewaterhourse a poner una salvedad muy significativa en el informe de auditoría. “La situación de pérdidas continuadas en la que se encuentra la sociedad es un indicador de un posible deterioro de valor de los activos no corrientes no financieros (Inmovilizado intangible, material e impuesto diferido activo) que ascienden a un total de 29 millones de euros”.
Unas advertencias en mal momento.

Pricewaterhouse explica en el informe de las cuentas individuales que Angulas Aguinaga Burgos “ha llevado a cabo las preceptivas pruebas de recuperabilidad de valor en las que se consideran las expectativas futuras del negocio, sin que, como consecuencia de las mismas se haya practicado ninguna corrección valorativa”. En este sentido, añade que “las proyecciones realizadas se apoyan significativamente en el crecimiento de las ventas de una nueva línea de productos y en incrementos anuales acumulados medios de ventas de un 13,6% hasta 2017”.

Un golpe duro a la línea de flotación de la compañía, que admite que sus nuevos productos de valor añadido no han alcanzado las ventas esperadas, y un toque de atención a Portobello

Pero el auditor las rebate al exponer que “en las condiciones económicas actuales y con base en la historia reciente de la sociedad, entendernos que dichas proyecciones deberían adaptarse a un escenario más adecuado. En consecuencia, no es posible determinar objetivamente el posible deterioro existente sobre dichos activos”. Más aún, Pricewaterhouse ya advirtió en su informe del ejercicio 2011 que la nueva estrategia comercial de Angulas Aguinaga y “la razonabilidad de tales estimaciones no pudo ser verificada con información contrastable de mercado”.
Un golpe duro a la línea de flotación de la compañía, que admite que sus nuevos productos de valor añadido no han alcanzado las ventas esperadas, y un toque de atención a Portobello, que está en fase de lanzamiento de su primer fondo como sociedad independizada de Ibersuizas. El private equitydirigido por Iñigo Sánchez Asiaín, Ramón Cerdeiras, Fernando Chinchurreta, y Juan Luis Ramírez Belaustegui ha salido al mercado a buscar 300 millones de euros para continuar con su actividad después de un intento fallido en 2012. La firma no ha respondido a las llamadas de este medio para conocer su versión sobre esta información.