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Morcilla de Cebolla y Puerro Jesús Mari Deba


Jesís Mari Deba

Country: España
City: 20709 Ezkio-Itxaso (Gipuzkoa)
Address: Poligono Andoaga, 7, Modulo 9
(+34) 943721710
Price: 10 € kilo


Una de las morcillas más laureadas; ganadora de innumerables concursos en el País Vasco, los más prestigiosos y en varias ocasiones muchos de ellos.
Responde en sus caracteres a la típica morcilla guipuzcoana, fundamentalmente de cebolla (75%), completada con puerro, además de manteca de cerdo y sangre. Llama la atención por su finura, por su jugosidad y por su atenuada sensación grasa. En dos palabras, delicada y ligera para lo que es habitual. Atemperamiento que se hace extensible a su aroma, con matices de orégano y a su picor, que no llega a producirse, tan sólo se insinuá, apenas llega a calentar la boca, deparado por la pimienta de cayena. Por tanto muy civilizada en todas sus manifestaciones y muy compensada.



Rabas de Alta Cocina, 200 Vinos por Copas y Tartar de Caballa o Verdel con Aromas de Ceviche

En el espacio de Rafa García Santos nos habla de rabas de alta cocina, 200 vinos por copas y tartar de caballa o verdel con aromas de ceviche (03/03/2013)

 

 

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La Industria Alimentaria 'Hereda' las Oscuras Tácticas de las Tabacaleras

Miguel Ángel Criado 

Durante décadas, la industria del tabaco usó su dinero para influir en los políticos, en los medios e incluso en la ciencia para socavar las políticas de salud pública. Tras perder aquella batalla en los países occidentales, llevaron su guerra a los menos desarrollados. Hoy, las multinacionales de comida procesada, refrescos y alcohol reproducen sus tácticas. Un informe las acusa de ser los principales vectores de las enfermedades no contagiosas (ENC) en el mundo. Y no hay pacto posible con ellas.
Los grandes casos judiciales contra esta industria mostraron cómo influía en la legislación de salud pública, con conexiones financieras o institucionales con la clase política. También revelaron oscuras maniobras como la Operación Berkshire, en la que siete de las principales tabaqueras idearon un plan para proteger sus intereses comerciales despertando dudas sobre la conexión entre tabaco y enfermedad o diseñando campañas para mantener la adicción de los fumadores.
Sin embargo, no pudieron evitar las leyes cada vez más restrictivas sobre su venta y consumo, primero en Estados Unidos y después en Europa, y las campañas de concienciación sobre los efectos perjudiciales del tabaco. Las ventas de las tabaqueras en el primer mundo se estancaron ya antes de este siglo y pusieron entonces sus ojos en el resto del planeta.
“Las compañías del tabaco acabaron yendo a los países donde había una menor regulación para expandir su mercado”, dice el profesor de salud pública de la Universidad de Melbourne (Australia), Rob Moodie. En efecto, mientras el consumo de tabaco y los beneficios que genera está en retroceso en los países más avanzados, en las naciones de bajos y medios ingresos ha crecido más de un 10% en la última década.
Moodie y otra decena de investigadores, entre los que está el profesorCarlos Monteiro, un destacado asesor de la ONU para las enfermedades no contagiosas derivadas de la dieta, han publicado un informe en la revista médica The Lancet donde acusan a estas compañías de ser las grandes responsables de la la moderna transición alimenticia: el abandono de los alimentos naturales o poco procesados por el de las comidas y bebidas ultraprocesadas.
La Comida Procesada Mata Más que el Tabaco
Mientras el tabaco mató a 6,3 millones de personas en 2010, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el alcohol se llevó por delante acasi 5 millones. Sin embargo, cada año mueren en el mundo 18 millonespor alguna ENC como afecciones cardiovasculares, sobrepeso, niveles excesivos de glucosa o colesterol en sangre. Para los autores del informe, la mayoría de esas muertes pueden ser atribuidas al consumo de comidas y bebidas ultraprocesadas.
“El aumento sustancial de los productos ultraprocesados tiene su paralelo en y está contribuyendo al incremento de la obesidad, la diabetes y otras enfermedades crónicas relacionadas con la dieta, en especial en los países de bajos y medios ingresos”, dice el informe, que señala a la búsqueda de nuevos beneficios de las multinacionales alimentarias como el principal motor de lo que los científicos empiezan a llamar como epidemias industriales.
El 75% de toda la comida que se vende en el mundo ya es procesada, según la base de datos de EuroMonitor Passport Global Market Information, y las grandes corporaciones controlan un tercio del mercado. En Estados Unidos, por ejemplo, 10 compañías copan la mitad de las ventas de alimentos.
En cuanto al mercado mundial, Coca-Cola y Pepsico controlan la mitad del negocio de las bebidas no alcohólicas. Firmas como Kraft Foods, Nestlé,Unilever o Danone ya se han encaramado a los primeros puestos en países emergentes como Rusia, Brasil, India o México.
Tal concentración de poder está siendo usada para frenar todas las iniciativas de salud pública que puedan afectar a su cuenta de resultados. Como hiciera la industria del tabaco, las de comida procesada, alcoholes y refrescos están desplegando un amplio abanico de estrategias para que no se legisle o actúe en su contra.
Cooptación de Políticos y Científicos
En el plano público, estas grandes corporaciones realizan campañas para asociar su imagen con la vida saludable. “Sólo hay que fijarse en las recientes de Coca-Cola intentando parecer promotora de salud mientras socava la iniciativa del alcalde Bloomberg en Nueva York contra los refrescos”, recuerda Moodie. El primer edil de la ciudad estadounidense inició el año pasado un movimiento para que los fabricantes de refrescos redujeran la cantidad de bebida que ofrecían en los locales públicos. Su plan antienvasesking size fue aprobado en septiembre pasado.

Por detrás, estas multinacionales han tomado el relevo de las firmas tabaqueras en las bambalinas de la política. Según datos del Senado de Estados Unidos, las principales empresas de alcohol de ese país dedicaron 150 millones de dólares en la última década a sus lobbies en Washington. Sólo en 2009, Pepsico invirtió otros nueve millones en 'trabajarse' el Congreso estadounidense.
También, como hiciera el Instituto del Tabaco, intentan distorsionar la investigación. Los artículos científicos patrocinados por estas corporaciones tienen entre 4 y 8 veces más probabilidades de favorecer sus intereses que los estudios independientes.
La Autorregulación no Funciona
En 2011, la ONU celebró una cumbre mundial para la prevención de las ENC. Su objetivo declarado era diseñar un plan para reducir las muertes por las enfermedades no contagiosas en un 25% en 2025. Para conseguirlo, se planteó una acción a gran escala que debía contar con la sociedad civil y el sector privado, incluidas las corporaciones alimentarias.
Como demuestra el caso del tabaco, la autorregulación de la industria, dejando en sus manos la responsabilidad de hacer productos más saludables,no funciona. Para los autores del informe sólo “la regulación o la amenaza de regulación gubernamental es el único camino para hacer cambiar a las corporaciones multinacionales”.
El gran problema es que la regulación por parte de los gobiernos puede funcionar, como demuestra el caso de Nueva York, en los países con estados fuertes. Para el resto del mundo, como dice Moodie, “será extraordinariamente difícil a los países menos desarrollados lidiar con estas grandes corporaciones multinacionales”.



Comer en el Trabajo Está Dañando Seriamente tu Bolsillo y tu Salud ¿Sabemos lo que Gastamos Cada Día?

Héctor G. Barnés. El Confidencial. 

La rutina es conocida. Cuando llegamos al trabajo, el café de primera hora es imperdonable. Nos sirve para despertarnos y charlar con los compañeros antes de comenzar una larga jornada laboral. Un par de horas más tarde, el hambre comienza a hacer acto de presencia, así que quizá nos dé por acudir a la máquina de vendingde la empresa y comprar unos cacahuetes, unas patatas, una chocolatina o incluso un sándwich envasado. Todo cambia al mediodía, porque seguramente habremos cocinado la noche anterior algo para llevarnos a la boca. Pero si no lo hemos hecho, quizá tengamos que salir a comer fuera. Total, un día es un día.
Por supuesto, el café de después de comer es imperdonable. Quizá no porque nos apetezca especialmente, pero sí porque nos permite relajarnos por un rato, a pesar de que la cafeína cause el efecto completamente opuesto. Por la tarde, el bucle entre el cansancio, el hambre y la máquina de vending vuelve a comenzar. Más cacahuetes, más chocolatinas y más sándwiches, si surge algún problema y la jornada se alarga. Pues bien, si es así, podremos haber gastado al año hasta más de 3.000 euros en el peor de los casos, 280 en el mejor. En 20 años de carrera, de 60.000 euros a 5.600. En cualquier caso, las montañas se hacen grano a grano, por mucho que ese café de media mañana que cuesta medio euro parezca perfectamente asequible.
Cuando gastamos más de lo que pensamos
Los consumidores gastamos dinero a dos velocidades. Una es la de las grandes compras –vivienda, coche, pero también electrodomésticos o tecnología–, y otra es la del día a día, que pasa muchísimo más desapercibida debido a que no supone dispendios particularmente cuantiosos. Esta semana, un estudio inglés ponía de manifiesto que toda una vida de comida en el trabajo puede costar unas 90.000 libras (más de 104.000 euros, unos 17 millones de pesetas) a lo largo de toda nuestra existencia.
La encuesta, cuyas conclusiones se enunciaban en un tono inequívocamente amenazador, señalaba que con el dinero que los ingleses gastan en bebida y comida durante su jornada laboral pueden pagar la hipoteca de una casa o saldar sus deudas hasta seis años antes de lo esperado. El cálculo cae por su propio peso: si la comida cuesta unas cinco libras, y el café dos y media, señala la investigación, sólo hay que sumar y multiplicar. Por eso mismo, es fácilmente extrapolable a España, ajustando los precios.
Veamos. Si el café en la máquina de vending puede costar unos 45 céntimos (más del doble si acudimos a una cafetería para tomarlo), y nos tomamos unos dos al día, estaremos gastando unos 90 céntimos en cafeína. Añadamos un margen de unos 60 céntimos para el complemento habitual –chocolate, algo de picar o una Coca-Cola– y nos encontraremos con un gasto de 10,5 euros semanales, 42 mensuales y 462 anuales, teniendo en cuenta que estamos un mes de vacaciones. Es decir, nos gastamos el sueldo de un becario sólo en tentempiés. Pero pensemos en grande y multipliquemos ese dinero por los 40 años de nuestra carrera laboral (década más, década menos) y veremos que gastamos más de 18.000 euros, tres millones de pesetas, en piscolabis.
Añadamos ahora la comida, si es que nuestra empresa no nos proporciona tickets restaurante. El menú del día puede salir por unos diez euros, aunque podemos acudir a un restaurante de comida rápida, lo cual bajaría a los seis euros. Dejémoslo en ocho: en ese caso, estaríamos gastando unos 160 euros al mes en comida, algo que no está al alcance de todos los bolsillos. Con el café y lossnacks, el montante ascendería a los 202 euros mensuales. Una encuesta publicada este mismo mes por la FUCI, Federación de Usuarios-Consumidores Independientes, elevaba esta cantidad a los 217 euros. Además, los datos de la organización señalaban que seis de cada diez españoles comen fuera de casa, debido a que no nos da tiempo a llegar al hogar durante el mediodía. De los cuales, un 58% comen de menú, mientras que el 37% se alimentan de la comida preparada en su propia casa. El 5% restante recurría a la carta del restaurante. ¿Estamos comiendo por encima de nuestras posibilidades?
Haciendo una sencilla regla de tres, y eliminando las vacaciones, invertiríamos unos 1.760 euros al año en comer fuera. Añadiendo los complementos, 2.222 euros al año. Es decir, más de dos sueldos mensuales de un mileurista. ¿Y si trabajamos durante 30 años en la misma empresa, gastando el mismo dinero? 52.800 euros solo en menús del día, 66.660 con café, Coca-Cola y galletitas. Nunca volverás a observar la sopa castellana y el filete de ternera con los mismos ojos.
El peso de la comida en la oficina
Otro estudio publicado en Gran Bretaña esta misma semana alerta ante las graves consecuencias que comer durante la jornada laboral puede tener no tan sólo para nuestro bolsillo, sino también para nuestra salud. Resulta cada vez más habitual que el frenesí laboral, acuciado por la atención continua que depositamos en la red y el teléfono móvil, nos empuje a comer en nuestro propio escritorio. Muchas veces, lo primero que pillamos, que cuanto antes nos lo ventilemos, mejor que mejor. Como señalan los datos del estudio, uno de cada diez ingleses realiza tres de las comidas diarias en su puesto de trabajo, aun a costa de su salud mental y física.
Los datos recogidos por la empresa proveedora de material de oficina Viking señalan que hasta un 50% de los ingleses comen y desayunan en su escritorio, que un 20% arrasa con la máquina de vending en algún momento a lo largo del día y que la veda se abre a las diez de la mañana, de manera que a las cinco de la tarde, muchos trabajadores vuelven a tener hambre y realizan su tercera comida a dicha hora. Con unos sencillos ajustes temporales ocasionados por el hecho de que la jornada laboral española suele comenzar más tarde, más o menos ese podría ser el mismo horario al que nos enfrentamos en nuestro día a día.
Las consecuencias de comer en nuestro trabajo continuamente pueden ser muy negativas. En primer lugar, como señala la Asociación de Diabéticos Estadounidense, porque nos convertimos en comedores sin conocimiento, ya que nos dejamos distraer por el ordenador o el teléfono y no nos damos cuenta de lo que nos llevamos a la boca, alimentándonos más de lo necesario. Como hemos señalado anteriormente, la alimentación ‘mindful’ es esencial para comer correctamente.
No permitirnos una pausa para comer, además, agrava el estrés, y masticar mal y de forma apresurada puede hacernos ganar peso rápidamente. Una última razón para evitar comer en la oficina: el teclado y el ratón del ordenador son el hábitat preferido para un gran número de genes que nuestros dedos transportan. Como señalaba un estudio realizado por médicos del University College London Hospital, los teclados de nuestra computadora pueden tener un 400% más de posibilidades de tener gérmenes que un cuarto de baño. Así pues, cuando el nerviosismo te venza y quieras ganar unos minutos comiendo frente a la pantalla, quizá convenga recordarse esta larga lista de consecuencias negativas.



8,25

Alda Selección Xarel-lo 11


Sumarroca

Type: Blanco
Country: España
Region: Penedés
City: 08940 Cornellá del Llobregat (Barcelona)
Address: Carretera del Prat, 67 - Polígono Industrial Almeda
(+34)942222515
Year established: 2009
Production (bottles): 7.000 botellas
Vineyard area: 1
Brands: Alda Seleción Xarel.lo, Alda Selección Pinot Noire y Alda Selección Bumper.
Price: 20 €


  Un proyecto conjunto de Rafael Prieto “El Serbal”, “El Nuevo Molino” y “El Grand Cru” y Sumarroca nacido en 2009, que comprende un blanco, que varía cada añada y y dos tintos, todos ellos se comercializan con el nombre Alda Selección, que exclusivamente se comercializan en los citados establecimientos al precio de 20 € en mesa y a 10 € por cajas de 6 botellas para llevar. Bumper cotiza a 24 y 12 € respectivamente.

Este Alda Selección Xarel.lo es un vino muy personal y bastante complejo dentro de responder a la sociología con mayor demanda. Es fácil y envolvente y a la vez tiene enjundia y está plasmado técnicamente de manera impecable. Aromas frescos, frutosos, en los que aparecen sensaciones que evocan a manzana asada, a su vez a pera, también a frutas ácidas maduras. En boca tiene una entrada dulce, para mostrar después una constante y amortiguada acidez, ambos caracteres muy integrados, fusionados, que dejan paso a la frutosidad nasal reseñada y a una apreciable y estimable mineralidad, con un retrogusto amargo amortiguado.

70% xarel.lo,15% chardonnay y 15% parellada. 3.500 botellas. 

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¿Qué Comemos? El Fraude de la Carne de Caballo Pone en Jaque a la Cadena Alimentaria

 Raquel Benito. El Confidencial.

El 15 de enero, Irlanda anunciaba que había encontrado carne de caballo en hamburguesas precocinadas etiquetadas como carne de vacuno. El fraude estaba servido. A partir de ese momento, la estafa fue saltando fronteras: Alemania, Reino Unido, Italia… También España ha visto cómo marcas del renombre de Findús o Nestlé han tenido que retirar algunos de sus productos de las cadenas de distribución por contener equino.
El escándalo ha puesto en jaque a la cadena alimentaria. Los consumidores reclaman su derecho a saber qué están comiendo, las marcas afectadas se apresuran a restituir su imagen, los distribuidores se limitan a retirar de los lineales las partidas fraudulentas, sobre los proveedores recaen las peores sospechas y las autoridades llaman a la calma.

¿Han dado los proveedores gato por liebre?

El sistema de trazabilidad (conjunto de procedimientos que permiten conocer el histórico de un producto a lo largo de una cadena de suministros) permite identificar en qué punto se ha cometido la irregularidad. “No tenemos que fomentar el pánico en un sistema que funciona. No quiere decir que no haya accidentes y que no tengamos que aprender de todo esto", apuntó el comisario europeo de Sanidad,Tonio Borg.
En esta ocasión, la carne de caballo ha encontrado una grieta en el sistema y, a falta de que se confirmen las sospechas, el dedo acusador apunta a losproveedores. Especialmente al matadero Doly Com, en Rumanía.

En España, la proveedora de vacuno para Nestlé, Servocar, también ha sido señalada después de que la multinacional suiza retirara seis productos del mercado. La proveedora española ha asegurado que nunca ha distribuido, comprado o vendido carne de caballo. Además, ha incidido en que, como intermediario cárnico, no procesa ningún tipo de carne, sino que únicamente suministra piezas enteras.

¿Qué me estoy llevando a la boca?

"Es gravísimo que en los mataderos no se distinga el tipo de carne. Hay que depurar responsabilidades", apunta Rubén Sánchez, portavoz de Facua. En este sentido, sobre la posibilidad de introducir a nivel europeo un etiquetado en el país de origen para los productos cárnicos, Borg aboga por "mantener la mente abierta" sobre esta propuesta para la que ya hay encargados informes de impacto.

La Organización de Consumidores y Usuarios, por su parte, ha denunciado que la calidad de las hamburguesas es, en general, baja y su precio elevado. El principal problema, destaca, es la elevada presencia de tendones y cartílagos, usados en sustitución de carne de calidad. Estas afirmaciones han enfrentado a la OCU con la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (ANICE), que le ha acusado de "generar confusión y sensación de inseguridad en el consumidor".

Las marcas, unas víctimas más

Findus,Buitoni,  Nestlé, Ikea, Eroski… grandes marcas se han visto salpicadas por el escándalo al tener que retirar algunos de sus productos por contener carne equina. En un primer momento se escucharon rumores que explicaban la estafa como una estrategia de ahorro. "Es absurdo. Imposible. Marcas de la envergadura de las que se están viendo afectadas no se juegan su prestigio", señalan fuentes del sector. 
"Nos certificaban carne de vacuno francesa en nuestras recetas. En realidad nos daban carne de caballo rumana. Nos han engañado", subrayó en un comunicado Findus Francia, que se considera una "víctima" al igual que los consumidores. La misma posición han mantenido Nestlé e Ikea, que se apresuraron a anunciar una campaña extraordinaria de autocontroles.
La salud pública, fuera de peligro
Las autoridades se han puesto de acuerdo. La Unión Europea, los ministerios deArias Cañete (Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente) y Ana Mato (Sanidad), además de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas han mandado en las últimas semanas un único mensaje: “No se trata de un problema de salud pública”.
Además de este mensaje de calma, la UE ha puesto en marcha este viernes una campaña para detectar más casos de fraude. Los Estados miembro se han comprometido a realizar un total de 2.250 pruebas de ADN a alimentos procesados para determinar el alcance del problema. En nuestro país, los test y las pruebas para rastrear el fármaco fenilbutazona se repartirán de manera proporcional entre las comunidades autónomas, teniendo en cuenta el volumen de producción cárnica en cada una, según han explicado fuentes del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que conducirá los trabajos en coordinación con el Ministerio de Salud y Consumo.
El objetivo de las autoridades nacionales es lograr una prospección lo más amplia posible y por ello las pruebas se realizarán en todas las comunidades y en todos los eslabones de la cadena agroalimentaria, desde el procesado hasta los puntos de venta, pasando por las instalaciones de almacenado y fábricas, todo paratranquilizar al consumidor.



Yema de Huevo con Crema de Cocido Lebaniego y Carpaccio de Panceta

Yema de Huevo con Crema de Cocido Lebaniego y Carpaccio de Panceta
El Nuevo Molino
Chef: José Antonio González
Country: España
City: 39478 Puente Arce (Santander)
Address: Barrio Monseñor, 18
(+34) 942575055

Inspirado en el cocido lebaniego, que tantas y tantas veces hizo el jefe de cocina, José Antonio González, cuando trabajó en el Mesón del Oso, en Cosgaya, entre Potes y Fuente Dé, el más afamado guisandero de este potaje.
He aquí esta versión refinada, liviana e integrada en un solo plato, mejor, en un servicio, que condensa todo: la sopa que toma una densidad cremosa y un color verde vivo aportado por el repollo apenas escaldado; que lleva el huevo, no escalfado como antaño, solo la yema, caliente y cruda; también los garbanzos, fritos, crocantes y el cerdo, la panceta en gelatinosas láminas y el chorizo en pequeños tacos crujientes; así como el zancarrón, con similar corte y textura que la panceta. Sabores caseros renovados y atrezzados con erudición, técnicas actuales y buen gusto, sápido y estético. Conserva la suculencia de antaño aterciopelada, extraordinariamente aterciopelada en el fondo y la forma.



The Recipe



Ingredientes para 4 personas

500 gr. Panceta ahumada
500 gr. Garbanzos
3 Chorizos
2,5 L Agua
250 gr. Zancarrón de ternera
1 Hueso de jamón
120 gr. Patata
90 gr. Repollo
320 gr. Caldo de cocido
1 gr. Xantana
2 gr. Sal
1 yema de huevo

1 gr. Escamas de sal
Brotes de remolacha
500 Cl. Aceite de oliva virgen extra

 

Elaboración

En primer lugar introducimos el garbanzo, la panceta, el chorizo, el agua, el zancarrón y el hueso en la Olla Express. Cocer durante hora y veinte minutos, obteniendo así la base de un cocido lebaniego tradicional.
La panceta, el zancarrón y el chorizo lo dejamos enfriar, el garbanzo lo deshidratamos en la escalibur durante veinticuatro horas y en una parte del caldo obtenido cocemos las patatas.
Por otro lado, escaldamos las hojas de repollo, tratando de mezclar hojas del centro con algunas del exterior, ya que son más ricas en clorofila y por la tanto tendrán un color verdoso más intenso, y las refrescaremos en agua con hielo.
A continuación elaboramos la crema de cocido, para lo cual, trituramos en la Thermomix la patata, el caldo de cocido, las hojas de repollo, la sal y la Xantana. Lo pasamos por un colador y lo reservamos.

Presentación final

En una sartén ponemos la crema de cocido a calentar, sobre esta el zancarrón y la panceta finamente cortada en loncheadora.
A continuación disponemos encima una yema de huevo cruda e introducimos la sartén al horno precalentado a 180º durante dos minutos.
Seguidamente añadimos unos pequeños dados del chorizo salteado y los garbanzos, que tras haber sido secados, los hemos frito en aceite de oliva a 120º.
Por ultimo con escamas de sal, sazonamos la yema y damos un acento de frescor al plato con unos brotes de remolacha