Jamás nos cansaremos de repetir, por aquello de que nunca parece estar suficientemente aclarado, que las calificaciones que aquí aplicamos son de máximos. O si prefiere, que responden a la mejor comida que se vaya hacer en un restaurante, al mejor lechazo que le puedan asar, o al mejor foie gras o queso que pueda adquirir en una tienda y degustar. Pero ya se sabe que no todos los jamones son iguales, ni todas las chuletas, ni que todos los días sale exactamente igual una misma receta. Vamos, que el 9 puede ser un 8,5 y el 7 un 6,5.