Pablo Márquez

Oh Capitán, Mi Capitán

31/07/2014 - Pablo Márquez

  Alma marina encarcelada en cuerpo terrestre formada por todo lo bueno que hay en ti. Sin nacimiento ni muerte; sin principio ni fin. Quizás haya alguien que se la llevó mediante la filosofía. No te angusties Ángel. El hombre llegó a ser un alma y volverá a serlo...


Arsenal de virtudes acumuladas por la tripulación de Aponiente y su Patrón. El análisis de lo desconocido, la exaltación de lo no reconocido, tesón, convicción, ¡Cabezón!...Genialidad e integridad. Un barco de vapor rumbo infinito. Testimonio del mar inundando la tierra.

 

 Así aconteció mi última travesía en un Mar de Sentimientos...

–Comenzamos a modo de aperitivo el primer lance untando pan con mantequilla de diferentes plancton y con los famosos peculiares embutidos marinos inundando aroma a brasa, para la ocasión butifarra y chistorra de boga, descansando sobre yema de huevo, que en matices igualan con los que te pudiera obsequiar cualquier vecino del pueblo, con mucha más gracia. Si lleva usted un chorizo en el bolso creyendo tener que saciar su mono carnívoro en algún momento del ágape, huyendo apresurandamente al baño escondiendo tal demencia, que sepa que no lo va a tener que utilizar. ¿Cómo puede permanecer el retrogusto propio tras tal ingesta mentirera? No te lo puedes creer. 

-Abre el baile de la comuna de Nemo un cazón en adobo, de aspecto mantecoso y un tanto astringente, puro, limpio, homenajeando la supervivencia gaditana con la fritura (mijitas) servida en un cucurucho.

-Tipica inmejorable sardina asada en hueso de aceituna versus `anchoa´, (metamorfosis pichón), en el único guiño del menú a la chicha. Cada vez más lejos de aquí para estar más cerca de allí.

-Lo último en acuicultura. Aponiente cría gallinas en el cortijo abisal que ponen huevos y todo. Ejemplo de ello te sirven una yema marina, lo que viene siendo yema de huevo curada en sal, marinada en soja, rellena de dos huevas diferentes, ejerciendo de madrina del matrimonio entre una anchoa y un boquerón clásico de la cocina del mar llevada a otro concepto que se presenta a un tiempo.

-Sin pretensiones comparativas a las de Betanzos, intenciones competitivas ganadoras en la consagrada tortilla de camarones a la brasa, sin freír, incorporando los camarones crudos al final de la cocción, buscando la perfección de elementos, crujiente, nada aceitosa, con los bichitos en su punto, acompañá del desconocido dulzor del mar, un polisacárido que descubrieron el pasado año extraído de un tipo de plancton al que dan forma de temaki relleno del pescado favorito de Ángel, la xarda.

-Caballa al corte, colgada el día anterior en el tendedero pa que le de el aire, abanicándola confiriendo un ingrávido ahumado, refocilándose sobre un pilpil originado de extraer la grasa de la ventresca, emulsionándola con algas, en este caso lechuga de mar, alcanzando un punto extra de salinidad y una chispa picante que le otorga la harissa verde marroquí.

-Navaja en dos servicios. El primero se sirve frío con la carne en un aliño acompañada de erizos liofilizados envuelta en una hoja de sisho. El segundo se presenta templado; un sorrentino relleno del interior de la navaja cocinada con diferentes caldos, jugo yódico, emulsión de nata y jugo de berberechos. 

-Continua la jarana. Capuchina, una miga de pan empapada en marinera, coronada por una gran almeja al vapor. Un barquito marinero.

-Interrumpen la emisión para agasajarte con sus panes: de algas, focaccia de camarones y brioche de plancton y mantequilla.

-Glosa de un típico de Cádiz como son las papas con choco o papas en amarillo. Debajo de una lámina de patata confitada emerge un ravioli cuya funda está hecha con el cuerpo del choco cortado muy fino, relleno de un guiso de sus interiores, a la cochambrosa. Toda la pieza a la boca caldo incluido y ¡BOOM!

-Sobrevivimos al zambombazo goloseando huevo de choco crudo sobre una mantequilla noisette emusionada con la tinta y una capa de cebolla fina al oloroso.

-Limpiamos el paladar con una Infusión fría marina de mojama de Barbate con matices menta-poleo y hojas de cilantro con los propios picantes y cítricos.

 

Llegados a este punto usted se habrá tenido que dar cuenta de que los guiños a la cocina japonesa se esquivan en la gincana abstrayéndose emulaciones entregando método y solera.

 

-Acomentemos el segundo lance. Bloody Mary marino. Emulsión de plancton puro, con calamares de potera, y una emulsión fresca de agua de tomate con un poquito de picante. Una ahogadilla que te hace el Angelito.

-Su versión de la Caprese. Burrata rellena de sarda y miso con cierta dejadez amarga, acompañada de cherrys infusionados en hierbabuena.

-Pulpo seco a la brasa??? Se trata de una brandada de pescado de descarte, reinventando lo que no es con un material que no acaban de darle salida nunca.

-Traducción de una sopa fría Andaluza a modo de ajo verde, con agua de mar granizada y coquinas de huelva crudas.

-No doy crédito al aroma yodado que libera la siguiente invención. Ostra liofilizada viva, con la idea de que no pierda nada su alcalinidad. Una vez liofilizadas la emulsionan y hacen una harina pura de ostras, y con esa harina montan un merengue salado marino, encauzando a toda la gente que no puede comer ostra cruda ( la mayoría de personas), que les molesta o tienen intolerancia, para que no se pierdan el sabor de la misma ¡Viva la Pepa!

-¡Menuda trampa, que antojo! Gamba roja a la brasa, la cabeza tal cual, intocable, el cuerpo desnudo bañado en una salsa templada de callos marinos hechos con pellejitos de atún que aportan matices picantes. Hay cosas que es mejor no manosearlas por si te observa Poseidón.

-Arroz cremoso de plancton. El plato por antonomasia de la cocina de Ángel acentuando el sabor marino dentro de un arroz, cambiado en textura este año evitando quedar plano en boca. Arroz triturado, frito y rebozado en plancton para añadir crujiente y gelatina de plancton en la superficie aportando melosidad.

-Y continua la pasarela de sirenas. Vieira, macerada en cítricos, marcada sobre las brasas, acompañada de una salsa bourguignone.

-Un último salado previo al definitivo tercer lance. Empanada de atún rota (si no lo está, lo estará, no te preocupes por ese detalle), guiso de atún en la base, una espumita y galleta hojaldrada.

-Para limpiar sabores un primer postre refrescante, digestivo, Dulce Mar que lleva crema de chocolate blanco y el omnipresente plancton ,brunoise de manzana,  frutos rojos, helado de remolacha y brotes de rúcula.

-Hasta la aleta caudal todo es pez. La guasa no tiene fin. El día de los inocentes. Atónitos quedamos al comprobar que tras el postre, estos loquitos nos van a servir un pescado a la sal, una pieza que al desenterrarla corroboramos la gamberrada. ¡Un plátano! Toffe salado en la base, nueces de pecán caramelizadas y helado de lima.

-El show remata con una galleta de chocolate salada, onza de chocolate blanco con plancton, trufa rellena de chocolate líquido.

 

 

Recomendarles en su viaje al Puerto de Santa María no se olviden llevar la bacenilla. Si te resulta aburrido o pesado estar dos horas sentados para comer; si has discutido con la moza o lo has dejado con tu jefe; si tu cara no esboza una sonrisa y tu corazón está encogido, ya lo sabes: Para hacer bien el amor hay que venir al sur.

 

 

SI es que te tienes que reir, y reflexionar sobre si todas las cosas a las que les damos valor realmente merecen tal consideración. Y si lo cercano, modesto, rutinario debe inclinarse ante lo exótico, extrafalario, insólito.

Aponiente es el Vaticano perdido del piélago. La convicción del credo. Ensenada del navegante. 

Salvo debajo del agua, somos capaces de vivir en cualquier sitio. Todos...menos uno.

 
  • Algas (Pan con mantequilla de diferentes plancton)
  • Algas (Pan con mantequilla de diferentes plancton)
  • Algas (Pan con mantequilla de diferentes plancton)
  • Algas (Pan con mantequilla de diferentes plancton)
  • Boga
  • Boga
  • Pez Cuero
  • Pez Cuero
  • Sardina-Anchoa
  • Sardina-Anchoa
  • Boquerón
  • Boquerón
  • Huevas
  • Huevas
  • Camarones-Alistado
  • Camarones-Alistado
  • Navajas
  • Navajas
  • Almeja
  • Almeja
  • pan de algas, focaccia de camarones y brioche de plancton y mantequilla
  • pan de algas, focaccia de camarones y brioche de plancton y mantequilla
  • Chocos
  • chocos
  • Tinta
  • Tinta
  • Mojama
  • Mojama
  • Sarda
  • Sarda
  • Araña
  • Araña
  • Chirla
  • Chirla
  • Ostra
  • Ostra
  • Gamba
  • Gamba
  • Gamba
  • Gamba
  • Plancton (Tetraselmis)
  • Plancton (Tetraselmis)
  • Vieira
  • Vieira
  • Atún de Almadraba
  • Atún de Almadraba
  • Dulce Mar
  • Dulce Mar
  • A la Sal
  • A la Sal


Pablo Márquez

Pepe Solla: Remembranzas y Acrecentamiento

23/07/2014 - Pablo Márquez

 Una mañana calurosa temprano arranco mi coche y tras varias horas de carretera aparco en una de las casas de comidas con más historia y tradición evolutivas de Galicia. Pico el timbre. Me abre y recibe afectuosamente como siempre mi amigo Pepe Solla, padre del gran cocinero homónimo que todos conocemos y veneramos.

Nos sentamos en el salón de su hogar situado a escasos metros del restaurante y le ruego hacer un poco de memoria de como era y como es…

 

Pontevedra ciudad encantada, lindo jardín. Mientras A Coruña se divierte, Vigo trabaja, Pontevedra duerme. En nuestra ciudad no debemos estar a expensas solamente del turismo, nos falta un poquito de actividad empresarial para que esto fuera el Edén. Eso si, para mi edad es el lugar ideal. Cuantioso atractivo gastronómico. Todas las plazas están invadidas de mesas, y le dan una vida a la ciudad inmejorable. Tapas y casitas de comidas populares. El paisano de aquí es muy cercano. Restaurantes en el centro como Román y el extrarradio como Corinto. La visita obliga acercarse a Combarro y vivir Sanxenxo. Las playas de esta carretera están resguardadas del Norte.

 

Deseo que todos los que tienen negocios trabajen. Yo sigo sintiendo esta profesión a pesar de mis años. Lo importante es abrir el abanico. La cocina tradicional sigue teniendo sus platos, caldeiradas que todos disfrutamos. La cocina de Autor nos ha dado la manera de respetar aún más el producto de calidad presentándolo de una manera muy natural con poco disfraz, llegando al consumidor con su verdadero sabor.

 Las escuelas de hostelería han hecho mucho por nosotros con la teoría que imparten, la educación y exigencia, a pesar de que salen con poca práctica los alumnos, adquieren base y principios que facilitan al máximo su adaptación. Nada que ver a cuando empecé.

Los cocineros de antaño eran desertores del arado.

 

El mercado de Pontevedra se nutría de lonjas como las de O Grove, Villagarcia y sus vecinos  Boiro, Rianxo, Riveira; los pescaditos pequeños de Portonovo, Bueu, Cambados; todos descargaban en nuestra plaza. Teníamos que movernos mucho y recorrer por las mañanas las plazas. Esa labor se facilita actualmente a los hosteleros ya que nos comunicamos directamente con los proveedores que tenemos en las lonjas y una vez amarran los barcos, sale el género disparado hacia nuestros locales con lo cual el producto llega vivo y coleando, y si uno tiene una emergencia encuentra buen producto hasta en los supermercados.

En nuestro río Lérez eran estupendas las sollas y sardinas en la desembocadura. Arriba había salmón, trucha e incluso lamprea. Hoy la solla y la lamprea desaparecieron pero los arenales son muy buenos para la almeja y berberecho.

Teníamos buena huerta en Poio, Lourido, en Salcedo, Bao, Campañó que incluso atesora vino.

 Hoy día la calidad es máxima. No bastan las palabras si no acompañan hechos.

Aún recuerdo las señoras que venían con sus pimientos y tenían que pagar fialato en el puente de la Barca. Las lecheras con los cantos en la cabeza. Se realizaban grandes ferias de ganado en la Plaza de Teucro. Restaurantes como Epifanio o Calixto, que era el no va más, justificaban el desplazamiento a la capital. Aquellos platos de cocido de Casa Celso en mesas corridas, la carne guisada con patatas, los callos, el pulpo. Un bonito ambiente pueblerino.

Después del 39 los carnavales no se celebraban en ningún sitio salvo en Pontevedra, incluso se toleraban las caretas por la calle. Los grandes bailes estaban invadidos.

Para la hostelería eran importantes estas celebraciones, las corridas de toros, la Peregrina, y el Pontevedra de `Hai que roelo´ en primera. Recomiendo a Feira Franca.

 Recuerdo con añoranza los escaparates de las confiterías Prieto, eran maestros artesanos. Allí no se recreaban los niños, lo hacían los mayores.

 

 El restaurante Solla se inició a raíz de que en frente del restaurante donde nacimos mis padres tenían un ultramarinos mixto con taberna y se compraban vinos de esta zona que se llamaba blanco catalán, (cuyo nombre no guarda relación con esa región), y la gente ya venía a merendar. Nuestros orígenes están ahí. Vendían vinos por litros para casa y también se chateaba. Mi padre tenía una buena condición y es que no bebía. Visitábamos las bodegas de la zona,Valiñas, Lantaño, hacia Portas. El cataba el vino, pero no lo tragaba, lo escupía, y siempre acertaba: ese vino era calidad. Eso hizo que mucha gente viniera los sábados a merendar aquí. Todo esto despertó en mí el gusanillo de la profesión por ese contacto tan cercano con la gente.

 Se mataban cerdos para vender al público y todas las semanas se hacían chorizos, se daba raxo adobado, zorza… Incluso preparábamos una tortilla jugosita al estilo Betanzos. Mi madre en la cocina y mi padre comprando. Teníamos una pequeña huerta con pollos tomateros, y ya comenzamos a trabajar por encargo. Más tarde se compró donde hoy está el restaurante una casita pequeñita de planta baja de la época, que tenía una parra debajo de la cual servíamos las meriendas-cena. Y todo comienza a rodar. Decido casarme, independizarme, obras y nace el restaurante Solla. Desaparece el ultramarinos y comienza mi aventura. Ya ves, hace más de 54 años ya hacíamos cositas aquí.

 A día de hoy trabajamos cuatro pazos para dar banquetes. Mi hijo forma muy bien equipos. Suso, hermano de Pepe coordina estupendamente este trabajo con la ayuda de Pablo, un compañero. Da gusto ver con que responsabilidad realizan su labor, muy comprometidos con el mismo. Eso sí me maravilla. Un día con todos los espacios en funcionamiento trabajan cerca de 100 personas…

 

Casa Solla: 54 años y más medrando, bienaventurados

 

Fotos: Germán Limeres

  • Pepe Solla
  • Pepe Solla
  • Plaza de la Leña
  • Plaza de la Leña
  • Valle Inclán fundiéndose con sus gentes en la Plaza de Méndez Núñez
  • Valle Inclán fundiéndose con sus gentes en la Plaza de Méndez Núñez
  • Restaurante Corinto
  • Restaurante Corinto
  • Casa Solla
  • Casa Solla
  • Vista Panorámica del Mercado de Pontevedra
  • Vista Panorámica del Mercado de Pontevedra
  • Puestos del Mercado de Pontevedra
  • Puestos del Mercado de Pontevedra
  • Tarta Rusa Pastelería Solla
  • Tarta Rusa Pastelería Solla
  • Casa Solla
  • Casa Solla


Chipirones a 45/50 Euros Que no son de Poteras y Vendrescas al Precio de Los Lomos de Bonito.

En el espacio de Rafa García Santos nos habla sobre Chipirones a 45/50 Euros Que no son de poteras y ventrescas al precio de los lomos de bonito. (13/07/2014)

 

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Chipirones a 45/50 Euros Que no son de Poteras y Vendrescas al Precio de Los Lom


8,5

Sobaos Pasiegos La Zapita


Pablo Pelayo Alonso

Pays: España
Localité: 39685 La Vega de Pas (Cantabria)‎
Adresse: José Manuel Abascal, 3
(+34) 942595059
Prix à la carte: 6 € el paquete de 6 unidades grandes que pesa unos 850 g.


     Pablo Pelayo sigue las costumbres ancestrales del lugar. La primera es procurarse la mejor mantequilla procedente de las vacas de Cantabria y, luego, aplicar una esmerada técnica de elaboración, propia de la mejor pastelería artesanal. Una y otra posibilitan un producto extremadamente delicado, tanto en gusto como en textura. Jugosos, esponjosos, exquisitamente mantequillosos (100%), imperando este sabor sobre el azúcar, los huevos y la harina de trigo, muy equilibrados, con la justa dulzura. Insistimos, suculentos y fáciles de comer dadas su nobleza, refinamiento y liviandad. Siempre mejor los grandes, siempre mejor cuanto más frescos. En verdad naturales, sin conservantes, ni colorantes. La etiqueta aconseja calentarlos en el horno, lo que potencia su manjarosidad.



Rojo & Red

Rojo & red

 1ª Jornadas del Atún rojo de Mazarrón

 La bahía de mazarrón brilla con luz propia, y esto se debe gracias al primer encuentro de cocineros de estrellas michelín que se desarrolló en el puerto deportivo de Mazarrón.

 El cóctel de bienvenida en estas jornadas gastronómicas lo puso una levantá de más de tonelada y media de bonito, atunes y albacoretas que se capturaron en esta almadraba de la costa murciana, actualmente única en el mediterraneo español. Aquí el vídeo: www.youtube.com/watch?v=nob41-KNfzw

 La "levantá" es un arte milenario de la costa mediterranea que llegó por manos de los romanos, fenicios y griegos a estas cóstas en el s. I y consiste en agrupar  un conjunto de redes en el fondo del mar por donde se dan entrada a los distintos peces hasta conducirlos a un lugar donde no encuentran salida. Es entonces donde comienzan los pescadores a agruparse con los barcos y empiezan a tirar de las redes a la misma vez hasta dejar un circulo completamente cerrado. Una vez que los peces se encuentran sin salida, los pescadores de las embarcaciones supervisan las redes y tiran de ellas hasta lograr subir el pescado a bordo.

 En época romana, el puerto de Almazarrón (actualmente  Mazarrón) era el punto de entrada y salida de todos los puertos donde se comercializaba todo el pescado y salazones de la zona y elaboraban magnificos manjares, como es el caso del popular Garum (una salsa típica de la zona elaborada a base de vísceras de pescado, fermentadas en pilas de piedra o arcilla durante cuarenta dias al sol y que trituraban y  aliñaban con aceite de oliva y diferentes tipos de especias: tomillo, romero, oregano...) para comercializarlo al resto de Europa: Italia, grecia...; y del mundo. 

 A parte de los productos del mar, Mazarrón es significativo por los excelentes productos de calidad de la tierra y es que son tan inmensos los  cultivos de invernaderos de tomate que podemos encontrar , que con tan solo adentrándonos en la bahía brillan con luz propia.

 Por todo ello, tuvo lugar el primer encuentro de las jornadas del Atún Rojo de Mazarrón, donde una veintena de cocineros se reunieron para homenajear estos productos estrella de la zona y donde elaboraron al público existente multitud de platos donde resaltaba el atún como ingrediente principal del plato.

 Cocineros como Firo Vázquez, del Restaurante El Olivar de Moratalla, David Muñoz, del restaurante Alborada, Ricardo Sanz, del restaurante Kabuki, Tomás Écija, del restaurante El Albero y la Maita, Ginés José Nicolás, del restaurante Rincón de Pepe, Patricio Alarcón, del restaurante Enso Sushi, Pablo González Conejero, del Restaurante  Cabaña Buenavista, Alberto del Cerro, del Restaurante el Pollo Rockero, Antonio Nicolás, del Restaurante Alejandro, David lópez, del grupo Las flores, entre otros muchos, y sumiller como Joan Belda, de Cabaña Buenavista, Antonio Chacón, profesor y sumiller de la CCT y David Seijas de El Bulli.

Catas organolépticas de salazones, show cooking, catas y maridaje de vinos, cocina para niños , concursos de cocina y más de 20 stands de restaurantes y comercios de la zona donde ofrecieron una gran delicatessen de sus mejores productos para todo el visitante que se acercara al paseo Marítimo de Mazarrón.

    

      

      

  • Ronqueo del atún en el Muelle pesquero de Puerto de Mazarrón
  • Ronqueo del atún en el Muelle pesquero de Puerto de Mazarrón
  • Ricardo Sanz de Restaurante Kabuki, desarrollando la conferencia
  • Ricardo Sanz de Restaurante Kabuki, desarrollando la conferencia


La Gastronomía Al Desnudo

 Llevábamos tiempo queriendo ir a Quique Dacosta –restaurante-, mejor dicho, repetir este sitio que frecuento desde hace 28 años. He vivido todas sus etapas aunque no de forma continua y asidua como me hubiera gustado pero si de manera constante en el tiempo. La primera vez que fui, me llevó mi padre, tenía 14 años y sin saber muy bien lo que significaba la gastronomía me encontré con un sitio sugestivo, acogedor, un restaurante que tocaba todas las materias primas y que cuidaba mucho los aspectos más puristas de un local de clase. Entonces me di cuenta de lo que significaba el Poblet, todo el mundo lo reconocía y por entonces su dueño Tomás Arribas marcaba un estilo y características propias de su personalidad. Quique Dacosta inició allí sus andaduras, me atrevería a decir empezaba ese hombre maduro y futuro cocinero; una vez jefe de cocina se planteó establecerse por su cuenta pero “su jefe” (Tomás Arribas) le propuso ser su socio al 50% y se quedó; para luego en el 2008 comprar a Arribas su participación en El Poblet, con lo que se convertía en el propietario único del establecimiento -hoy Quique Dacosta-, que en noviembre de 2012 consiguió su tercera estrella Michelin, el mismo año que Eneko Atxa, de Azurmendi también entro en el Olimpo del estrellato. 

He visto la forma de proceder de este local  -sin, con, una, dos y tres estrellas- y el denominador común ha sido siempre el mismo: imaginación, emoción, estilo, oficio, entorno, la tierra y el sabor mediterráneo. Quique siempre ha imaginado la tierra del mañana, te lo ofrece en su cuaderno al comienzo de la comida para que puedas entender donde estas y tomar apuntes -esto último más complicado- . De esta forma se entiende porque ha sido el creador de la nueva cocina Valenciana, porqué vive la cocina inspirada en el arte y la naturaleza y porque  entiende la vida a través de su etapa de transición creativa. Aunque el distingue de manera muy diferenciada los anteriores estilos, personalmente y de manera arrogante los hago todo uno, aunque de manera escalonada y espacial, midiendo muy bien los tiempos y las líneas del cambio.

Quique se siente libre. Ahí está la esencia de Quique Dacosta, crea nuevos códigos. Toda una vida dedicada a la cocina. Ello se ve en el concepto de restaurante, servicio y construcción de su nuevo menú, que el mismo califica como que: “pasa de ofrecer “x” platos a ninguno propiamente dicho”. Me cuesta todavía entender algunos aspectos de la sala y disposición en mesa. Será que me falta mundo gastronómico. 

Me atrevo a decir y no sin posibilidades de replica que es el último bastión y reminiscencia más cercana de lo que fue el gran “Bulli”. Conocer es recordar y esto va muy unido al concepto exigente que imprime, en el que el factor humano es indispensable y la gastronomía se hace a través de una vida dedicada a la cocina, pero sin su Denia no podría haber creado esto. Es todo tan global que al final siempre acaba en el mismo universo gastronómico desde la tradición a la innovación. Técnica, pasión, oficio, expresión, exigencia, dedicación, creatividad, todo lo anterior rodeado de equipo y  humanidad. Elaboraciones y creaciones con vida independiente, estructurales, experimentales, dinámicas y pasionales.

A Quique le ha llegado la hora de representar en cada bocado que ofrece un lenguaje de su fantasía e ilusión, se plasma la pureza extrema, la vanguardia, poesía y prosa; belleza, sentimiento y expresión libre y sin pautas. No pienso hablar de puntos de cocción, materia prima, elaboración y presentación, de bocados, de complejidad en boca, del sentido, del gusto y la conjunción. No puedo hablar de lo anterior porque no quiero hacerlo mío. Indicar que elegimos el menú tomorrowland, cocina de vanguardia española. Compuesto de 1º acto, 9 snaks; 2º acto, 3 encurtidos y salazones; 3º acto, 8 tapas; 4º acto, 6 platos; 5º acto, 2 carnes; 6º acto, 3 postres y 7º y último acto dulcería, varias composiciones.

Y si como bien dice Quique “soy un obrero de la cocina que pretendo expresarme a través de ella”, agradecería a quién me lea que entre todos hagamos lo posible para que vuelva la construcción a nuestro país. Necesitamos más obreros.

 


Madrid: Al Trapo

 A los dieciocho uno sueña con sacar el carnet. Paco Morales idealiza con darle la vuellta al cuentatakilómetros.Casi cinco años con Andoni, una temporada con Ferran., otras dos en Senzone y cuatro en Bocairent. Premio al Grande del mañana Lo Mejor de la Gastronomía y Premio Internacional Lo Mejor de la Gastronomía, una estrella, dos soles, múltiples reconocimentos...Subidas, bajadas. El auto en punto muerto. Actualmente celebra su segunda temporada en Torralbenc Menorca asentando su cocina fresca autóctona y la primera en el Hotel de las Letras en la Gran Vía madrileña como asesor gastronómico de este nuevo espacio de cristaleras Newyorkinas, Al Trapo. Bistró moderno de afectuosidad informal. Sin presión. Libertad de Guías con pocos prejuicios. Cocina viajera, canalla, simpática, gustosa, sin ataduras de servicio. Modestia vestida de seda. Comer bien sin rasgarse las vestiduras divirtiéndose comprometidos con la felicidad del comensal.

Paco domina como pocos la técnica, posee destreza, conocimento, vanguardia académica. Y es un gamberro.

Aquí no se cambia la carta, se trocan los platos. Ocho apartados tuneables, que permiten fexibilidad para comer lo que uno quiere, cuando quiere, utilizando el tiempo disponible y gastando lo que determine. Réplicas de alta cocina modificada, que permiten al equipo dirigido por Rafael Cordón hacer vanguardia sin despeinarse. Unas treinta referencias con cambio estacional de vinos. Golosinas saladas, pequeñas explosiones controladas.

 Una composición podría formarse con las siguientes proposiciones:

 -Aireados de tortilla española. Consta de una masa de pan muy fina para que suflé rellena de tortilla de patata con la cual  han hecho una crema anteriormente. Pimientos verdes fritos a los que sacan círculos de ellos y rectángulos de anchoa de Santoña cortados

 -A modo de ensalada. Verduras de temporada, las escaldan muy poco tiempo para que queden al dente. (La verdura variara según temporada) Untan algunas en pasta de achiote, con la mozzarella y texturizan el suero que  sirve de aliño.

 -Chantarelas salteadas. Hacen una bechamel gelificada, fondo oscuro y nata para darle untuosidad.

 -Calamarcitos salteados. Hacen diferentes texturas de coliflor, aire de pimienta, saltean los calamarcitos, hacen un caldo de calamar y lo clarifican.

-Pichón asado. Fondo oscuro de salsa de ostra y ternera. Saltean la pasta udón con setas de temporada y lo marcan en sárten y unos minutos en el horno.

- Rabo de toro. Cocinado a baja temperatura durante 14 horas. Lo acompañan con ñoquis de polenta, cañaillas y menta.

 - Frutos rojos. Merengue de mora, petit suis de cereza, un helado de frutos rojos y diferentes frutos frescos rojos.

 - Petit fous. Algodón de azúcar con arena de cacao y coco deshidratado.

 Platos estudiados, brindando salsas y contrastes.

 

Mientras el viaje continúa, Paco perfila su buque insignia en Córdoba, Noor, estudiando el pasado, diseñando el futuro. Cocina Árabe, Mozárabe y Judía dando una nueva vuelta de tuerca al invento. Una zona takeaway frente a otra gastronómica rentabilizarán un proyecto sustentado en la sorpresa, la diferencia y la vanguardia comprensible. ¿Será una nueva estación de servicio en la trayecto o un stop terminante? 

Si ustedes buscan un asesor gastronómico para su proyecto, y consiguen convencerlo, Paco Morales quizás pueda ayudarles.

Localité: Madrid
Adresse: Caballero De Gracia 11
+34 915 242 305
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Jours de fermeture: domingos y lunes mediodía; del 3 al 26 de agosto por vacaciones
Prix: 40/50 Euros €


Aireados De Tortilla Española A Modo De Ensalada Chantarelas Salteadas Calamarcitos Salteados Pichón Asado  Rabo De Toro Frutos Rojos Petit Fous


El lado `Verde´ de la FUERZA

El lado `Verde´ de la FUERZA

07/07/2014 - Pablo Márquez

  Ponderado Rodrigo:

Un buen suelo es esencial para una buena cosecha. El suelo debe tener todos los nutrientes necesarios para el crecimiento de las plantas, y una estructura que las mantenga firmes y derechas. La estructura del suelo debe asegurar suficiente aire y agua para las raíces de la planta, pero debe evitar el exceso de agua mediante un buen drenaje. El humus se pierde rápidamente si al suelo se lo deja expuesto. La mayor parte de los nutrientes se reciclan por las raíces de la planta y vuelven al suelo a través de las hojas que caen de la misma. Gusanos, insectos y pequeños organismos como los hongos, alimentan también al suelo con materia orgánica y lo cambian para producir humus, el cual hace que la capa inferior del suelo sea oscura y tenga una buena estructura. El humus se pierde rápidamente si al suelo se lo deja expuesto al aire por mucho tiempo sin ninguna cobertura. El subsuelo, es generalmente menos fértil. El suelo es la mejor capa para la producción. Hay suelos que son naturalmente fértiles, pero en muchos lugares el suelo es naturalmente de poca fertilidad o tiene una pérdida de nutrientes. Para alcanzar una producción importante de cultivos, un agricultor debe mejorar la fertilidad y la estructura del suelo. Los cultivos saludables crecerán solamente si el suelo tiene suficientes nutrientes. Algunos nutrientes químicos en el suelo son estables mientras que otros se pierden o se consumen muy fácilmente. Un agricultor necesita hacer una aplicación básica y suficiente de nutrientes para empezar su huerto, y luego mantener una aplicación regular de los mismos mientras el cultivo crece. Un suelo pobre puede llegar a ser productivo si está bien manejado...

 

 Cultivador nómada, colono, tuareg nutrido con dátiles frescos, no ha sido lugar este para plantar en él tus arrestos. 

 Quedamos como higos todos tus amigos, en estos días de tormenta propalando la noticia con sabor a menta.

 Nos has hecho disfrutar más de una endibia que de caviar. Dentista, futbolísta, ¡Amén!, cura, optimista. 

 Coge fuerzas con un plato de aquellas matriarcales estofadas lentejas y continúa tu camino, que no te importe un comino la mala experiencia, y ten paciencia, benevolencia, manten tu creencia. 

 No busques respuestas, ni coseches apuestas, debes morir con las botas puestas.

 Lo que tu haces, no se aprende si no naces. 

 

`La naturaleza nunca destruye nada a no ser que dé algo mejor´.

 

 Un poco de historia. (Madrid, 1976) Rodrigo de la Calle es una persona convencida de que los actores secundarios pueden convertirse en los grandes protagonistas de la película. Conocido internacionalmente por ser el artífice de la Revolución Verde, Rodrigo siempre ha sentido la inquietud de experimentar con los vegetales como si de un afanado investigador se tratara. Después de estudiar Hostelería en el IES de Madrid pasó por las cocinas de hasta 36 restaurantes como La Taula del Hotel Milenio, en Elche. Sitio significativo porque allí conoció al botánico Santiago Orts y a través de esta amistad su percepción del mundo vegetal cambió más aún. Su cocina comenzó a verse inundada por vegetales hasta entonces desconocidos para la mayoría de sus comensales, abriendo el camino a la Gastrobotánica, afianzado en su paso por Mugaritz, donde la cocina de Andoni L. Aduriz supuso para él  una segunda revolución culinaria: la aproximación al mundo vegetal, las técnicas de elaboración del foie, el ahumado y muchas otras. El universo dulce lo aprendió del gran Torreblanca y los arroces, que tanto le gustan, en el antiguo El Poblet hoy Restaurante Quique Dacosta, culminando su formación en el  restaurante Martín Berasategui, su maestro.

Después de todo este periplo y de vivir en nueve ciudades diferentes, su proyecto personal vio la luz en 2007 en Aranjuez, el restaurante Rodrigo de la Calle, con una carta basada en el producto vegetal de temporada y los arroces como eje central de su propuesta culinaria.

El concepto de Gastrobotánica, desarrollado junto a Santiago Orts fue presentado en Madrid Fusión 2009 como una visión culinaria que revindica la búsqueda de productos vegetales olvidados con un altísimo valor gastronómico, con el objetivo de analizar sus posibilidades culinarias, productivas y comerciales. Tal es el caso de la anémona de tierra, el caviar cítrico o las verduras del desierto, entre otras. En 2010 publicó su primer libro con el mismo nombre: Gastrobotánica, en el que recoge su filosofía de trabajo ilustrada con numerosas recetas al alcance del gran público.

 

Su cocina es sorprendente, compleja, sabrosa, enérgica, llena de trampantojos. Destaca su tremenda precisión técnica que le permite insertar componentes que combinen a la perfección. Su ingrediente principal es el cariño, y su afán, que esté rico, tal como le enseñó Berasategui.

Todo este esfuerzo y buen hacer le ha valido su presencia en multitud de congresos y premios como Cocinero Revelación en Madrid Fusión 2008, Premio Bacalao Giraldo 2009, Mejor restaurante de la Comunidad de Madrid por la guía Metrópoli… Pero sin duda 2010 fue su año; premiado por la Cámara de Comercio de Madrid como Cocinero del año, obtuvo además su segundo sol en la guía Repsol y fue galardonado por la Academia Internacional de gastronomía como Chef L'Avenir. Recibió su primera Estrella Michelin el 24 de Noviembre de 2011.

Superada la etapa gastrobotánica Rodrigo de la Calle está inmerso y avanza con paso firme hacia la completa revolución verde. En esta nueva andadura ha encontrado la complicidad de dos proveedores: Ricardo Ruiz y José Cabrera, comprometidos con el producto fresco de cultivo orgánico, y que lo abastecen de hortalizas de todas las estaciones del año, aunque también de germinados, brotes, protovegetales, lechugas… y un espectacular aceite variedad changlot real. Con todo ello Rodrigo pone en práctica un menú que es toda una declaración de intenciones. Aperitivos a base de flor de maíz frita con Ras el Hanout; sándwich de mantequilla de cítricos; espuma caliente de algas y hongos y magdalenas de algas con verdolaga y untuoso de jamón ibérico. Platos como “Huerta de Carabaña”; un consomé gelée, champiñón de París y tabulé; hierbas aromáticas; la ensalada verde; la acelga líquida, ostra y cítricos; la endibia asada con untuoso de legumbres; el final de la ensalada; las berenjenas tostadas y aliñadas; el arroz arborio con remolacha y mollejas de cordero y el tartar vegetal.

En el dulce: el melocotón de la sangría; hinojo, pepino y mantequilla quemada; raíces pivotantes; lácteos y buñuelos vegetales… son sólo una pequeña parte de los ejemplos. 

Cerró su restaurante para centrarse en dirigir la cocina del Hotel Villa Magna de Madrid, proyecto en el que ya no está presente. En conclusión, ¿con qué nueva aventura nos sorprenderá el chef aliado con la madre naturaleza para llevar a cabo una transición entre la gastrobotánica y la “revolución verde”?

 

 

A continuación, un fantástico menú que me dedicó Rodrigo de la Calle hace unos meses en el Restaurante Villa Magna. No lo olvidaré.

 

 

  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Snack Vegetales
  • Aguachile De Pamplinas Y Escarola Con Flores De Cultivo
  • Aguachile De Pamplinas Y Escarola Con Flores De Cultivo
  • Guisantes Y Caviar Con Infusión Acidulada
  • Guisantes Y Caviar Con Infusión Acidulada
  • Espaguettis Vegetales Al Pesto
  • Espaguettis Vegetales Al Pesto
  • Gachas De Ajo Negro Con Borrajas
  • Gachas De Ajo Negro Con Borrajas
  • Verduras En Arroz, Arroz En Las Verduras
  • Verduras En Arroz, Arroz En Las Verduras
  • Mosaico Estacional De Verduras De Invierno
  • Mosaico Estacional De Verduras De Invierno
  • Salsifis Asados Con Guiso De Avellanas
  • Salsifis Asados Con Guiso De Avellanas
  • Sopa De Acelga Y Morros De Salmón
  • Sopa De Acelga Y Morros De Salmón
  • Arroz Bomba De Sésamo Negro, Bimi Y Ramallo Cremoso
  • Arroz Bomba De Sésamo Negro, Bimi Y Ramallo Cremoso
  • Callos Caseros De Huerta A La Madrileña
  • Callos Caseros De Huerta A La Madrileña
  • Yogur De Lavanda, Membrillo, Castañas Y Manzana
  • Yogur De Lavanda, Membrillo, Castañas Y Manzana
  • Bizcocho Seco De Café, Pera Y Arroz Fundido
  • Bizcocho Seco De Café, Pera Y Arroz Fundido
  • Torrija Empapada En Leche De Chufa Con Vainilla Helada
  • Torrija Empapada En Leche De Chufa Con Vainilla Helada
  • Dulces Vegetales
  • Dulces Vegetales


Alvaro Garrido "Mina" en Zaldiaran: Sabía a lo Que Jugaba y Se Sintio Muy Seguro

      Álvaro Garrido tiene una cabeza sobresalientemente amueblada y posee un paladar privilegiado. Hay que añadir otros elogios, como que a sus 37 años ha sabido dictar una cocina diferente, alejada de modas y modelos, una culinaria con criterio, personal, cuyos platos no se parecen a los de ningún otro cocinero. Construcciones ingeniosas, muy trabajadas, harto complejas, con inmensos matices, sin que afecten a los ingredientes principales, que deparan sabores inmaculados, mientras los complementarios muestran contrastes chispeantes en virtuosa conjunción. Una coquinaria mental y palatalmente estimulante que busca diferenciarse sin estridencias. Una cocina para gourmets que persiguen ver y disfrutar imágenes inéditas. Por estas y otras razones el chef triunfó en Zaldiaran, sabedor de que el público que acude a las jornadas de Vitoria es congresual que anhela nuevos mensajes.
     El queso negro con infusión de setas y chicharrón de pollo es un coctel inédito que brinda diferentes texturas y en el que se entremezclan sabores lácteos, marinos, cárnicos, vegetales…alquimia muy compensada y cremosa que se desliza sutil por los paladares. Como también marcan la diferencia los mejillones, ingrediente humilde y majestuoso, que tanto le gusta a Álvaro y a nosotros, tan ninguneado en la alta cocina, que salen exultantes de oceanidad y jugosidad, a los que magnifica con un atenuado escabeche de chardonnay salpicado de electrizantes contrapuntos frutales y aromáticos: sopa de coco y citronela. Ingeniosa versión contemporánea inspirada en una conserva popular, de la que se distancia sustancialmente.
El artista no se corta lo más mínimo, volviendo a plantearnos menudencias a las que saca todo el partido y más: filamentos, por aquello de la forma, una juliana hermosa, de hígado de cabrito, refrescados con un jugo sustancioso, ciertamente vibrante, que delata lima y salvia, con avellanas y otros detalles, que contribuyen refrendar, una vez más, el estilo del chef. Siendo de Bilbao no podía faltar el bacalao…de otra manera. En vez en lomo en callos. E impregna a la manjarosidad gelatinosa, que preserva su pureza, del pasional exotismo que invade su mente, volviendo a evidenciar la debilidad por las sensaciones cítricas tintadas ardientemente de curry rojo.
     No cesa el riesgo milimétrico: “mousse”, por aquello de la forma y de estar rebajada, “mousse” o “terrina” de morcilla de cebolla y puerro, a la que se viste con frutos secos, piñones, con col encurtida y un fogonazo, un regusto a café, en inspiración italiana, además de un crujiente, para atenuar caracteres, que cautiva, que cautiva por el resultado global y por la compaginación de mundos.
Otro sempiterno del menú de Álvaro Garrido: el popular chicharro, que abunda en nuestras plazas en óptimo estado de frescor. Chicharro dispuesto de manera esencial, tratado con máxima técnica y mostrando toda su pureza. El lomo, en semisalazón y levemente ahumado, avivado sin excesos, aparece “crudo y caliente”, en su ser, con cromática y primorosa escenificación: puré de coliflor, salsa de sidra, rabanitos almibarados, hojas, especias…la intemerata. Para volverse loco.
     Más académica la carne: un medallón rosáceo de ternera, marinada y perfectamente asada, en su punto, cubierto por un fondo del mismo bicho, con dos ocurrencias que sazonan con audacia tan carnal bocado: una emulsión de hierbas y un puré de calabaza al cardamomo. Se buscó la perfección y agradar a todos, lo que se consiguió sobradamente.
Los postres refrendan la senda del compromiso artístico. Estuvieron a la altura de la cocina, tanto el osado Mar, oleadas gustativas, como el apabullante plátano con té earl grey y olivas negras, rebosante de gustosidad.
     Álvaro trasmite entrega, cariño, esfuerzo, imaginación, tantas y tantas cosas que el público y, en especial los gourmets, acaban entregados a tan pasionales sensaciones.

  • Queso Negro, Infusión de Setas y Chicharrón de Pollo. Foto: Vicugo.
  • Mejillones en Escabeche de Chardonnay, Sopa de Coco y Citronela. Foto: Vicugo.
  • Filamentos de Higado de Cabrito con Jugo de Salvia y Lima. Foto: Vicugo.
  • Callos de Bacalao, Curry Rojo y Matices Cítricos. Foto: Vicugo.
  • Sangre, Col Encurtida y Café. Foto: Vicugo.
  • Chicharro Ahumado, Sidra, Coliflor y Rábano. Foto: Vicugo.
  • Ternera Marinada y Asada con Emulsión de Hierbas y Calabaza al Cardamomo. Foto: Vicugo.
  • Plátano a la Vainilla, Té Earl Grey y Oliva Negra. Foto: Vicugo.


6,5

La Sidre

Kepa Bravo y Ahinara Mendia
Kepa Bravo y Ahinara Mendia
Pays: España
Localité: 01007 Vitoria-Gasteiz (Alava)
Adresse: Armentia. Larrintzar, 3.
mapa
(+34) 945131565
Jours de fermeture: Domingos noche y lunes
Prix à la carte: 30/50 €
Prix menu de dégustation: de Sidrería: 37 €


  • Besugo a la Brasa
  • Salchicha con Mostaza y Reducción de Txakol
  • Croquetas de Hongos
  • Morcilla de Sotopalacios González
  • Rodaballo a las Ascuas con Refrito

     La antigua “Sidrería San Prudencio” reformada y reformada. Situada en un entorno privilegiado de Vitoria, a 10 minutos en coche del centro de la ciudad, en el que predominan las campas. En las inmediaciones de la basílica de Armentia, que aloja al patrón de la ciudad, San Prudencio,
     Ofrece cocina típica de asador, con la parrilla de carbón como estrella, especializada en pescados y carnes, que completa con preparaciones sencillas tradicionales y productos estrellas tal cual. Todo muy sencillo, muy natural, muy auténtico. Estupendas materias primas, a las que se da un tratamiento atinado en la parrilla o en la sartén y que salen ciertamente impecables en su ser, sin apenas complementos y atrezzos.
     Valgan como ejemplo de lo aseverado las rodajas de salchicha en pincho, en verdad nobles, impregnadas de unos granos de mostaza entremezclados con una reducción de txakoli. No puede ser más austero y más gratificante. Con un toque diferenciador que no altera lo más mínimo el ser del condumio. Parecido podemos decir de las guindillas de Ibarra: pequeñas, frescas, “dulces” y uniformemente fritas, con una tonalidad verdosa que incita a la gula. Las croquetas de hongos, rebosantes de setas, que dejan la besamel en un papel secundario, no pueden ser más honestas y generosas. Una costa exterior más frágil…las llevaría a merecer una alta nota. Más producto estrella, la Morcilla de Sotopalacios, de una de las menorcitas marcas del país, Hermanos González, que sale impecablemente hecha, tostadita por fuera y justo caliente en el mismo centro, preservando plenamente su jugosidad. Un bocado capital para los adictos a los embutidos de sangre.
     Pescados siempre notables que se asan a las ascuas convencionalmente y se aderezan con atemperados refritos ligados. Las carnes del rodaballo o del besugo salen inmaculadas, en una cocción certera llamada a gustar a todos, con unos realces a su vez fáciles y satisfactorios.
     Vamos, se come magníficamente si se tiene claro a dónde se va y a lo qué se va. Y si Kepa Bravo manifiesta su profesionalidad en la parrilla, Ahinara Mendia atiende con suma diligencia y simpatía. Por todo ello, un sitio encantador.