En la línea que caracteriza a los Marqués de Cáceres Reserva y que en la práctica refrenda añada tras añada; si bien en este caso se supera dada la magnitud de la cosecha. Le distingue un bouquet profundo que recuerda a cerezas, fruta que alterna con una leve sensación dulce ligeramente especiada, apreciándose vainilla, canela, tabaco y tostados. En el paladar repite y se manifiesta con claridad la uva, con un deje a picota, también a ciruelas, muy bien integradas con la madera, mostrando frescor y torrefactos, chocolate y especias dulces. Elegante, armónico, con un apreciable carácter y una riqueza de matices que se agradece.
Ha sido elaborado con un 85% de tempranillo y un 15% de garnacha y graciano. Permaneció 22 meses en barricas de roble francés de entre 1 y 4 años.