6,5

Maestral

José Manuel Varó
José Manuel Varó
País: España
Localidad: 03016 Vistahermosa-Alicante
Dirección: Andalucía, 18
mapa
(+34) 965150376
Cierra: Domingos noche
Precio: 60/85 €
Precio menú degustación: 50 y 75 €


  • Salteado de cigalita y calamar con verduritas a la parrilla y confitadas
  • Salteado de cigalita y calamar con verduritas a la parrilla y confitadas
  • Bogavante horneado con puerros en su propio jugo
  • Bogavante horneado con puerros en su propio jugo
  • Salmonetes
  • Salmonetes
  • Langosta
  • Langosta

Si algo define a este restaurante es que congrega a los “VIP” alicantinos, que encuentran un marco señorial –magnífica villa con terraza en el jardín en verano-, un servicio esmerado y una cocina en consonancia con sus aspiraciones. Culinaria señorial en las formas y evolutiva en los contenidos, con formulaciones que atesoran conocimientos, sensatez y efectividad.
Infinidad de aperitivos se ofrecen en carta, llamados a configurar un picoteo o un menú tan largo como se desee, que puede completarse con uno, dos o tres platos principales. Entre los abrebocas destacan los buñuelos de bacalao, inmaculados tacos en fina y liviana gabardina; el pastelillo de rabo de buey con bacon y berza y la empanadilla frita con pisto y salazón son algunos ejemplos graciosos. Siempre queda la opción de un jamón Joselito Gran Reserva cortado a cuchillo delante del comensal, o de deleitarse con la mejor mojama, la del alicantino Vicente Leal, tierna y atemperada en sal, que se ofrece en compañía de unas almendras. Los pulpitos simplemente salteados, las gambas rojas a la plancha o cocidas, la espardenyes a la bilbaína... mil posibilidades.
La cigala, grande, pura y jugosa, aparece sobre una cama de berenjena ahumada y tomate, perfumada con ajo. Un clásico de la casa inexcusable: los calamares salteados con cebolla confitada y piñones, impecables en su sencillez. Igual de gloria lleva dando desde años ha el arroz con pata de ternera, mejor pata con arroz, en el que el comensal sale saturado de gustosidad y con los labios gelatinizados. Entre los pescados, la palma se la lleva la ventresca de atún, que se sirve según momentos, por ejemplo con rosellat de fideos, sin que le vayan a la zaga los salmonetes, que, a veces, aparecen al estragón con guisantes y setas frescas. La lubina, por frescor y punto, también sobresale, apareciendo vestida con un convencional canelón de espinacas y marisco y unas verduras torneadas y cocidas. Qué decir del bogavante horneado y de tantas y tantas cosas que convierten esta casa en el restaurante chic de la ciudad.